Las
Seis Mitzvot Constantes
MITZVA CONSTANTE
#6
La vida está llena de
estimulación sensorial: T.V, radio, letreros, Internet. Está
diseñada perfectamente para conectarse con nuestros impulsos viscerales. Y
la inclinación natural es perseguir estos impulsos implacablemente.
Por otro lado, la Torá
dice; “No te dejes llevar por tu corazón y tus ojos” (Números
15:39). La idea Judía es seguir la lógica, no a
los caprichos. Y precisamente porque el impulso sensorial es tan grande
y permanente es una mitzva constante - un desafío constante - el
permanecer en el camino correcto.
Como lo indica el versículo,
existen dos aspectos: el corazón y los ojos. Empecemos
por examinar “No te dejes llevar por tu corazón”.
AMA
A D-OS CON AMBOS CORAZONES
El versículo literalmente
dice: “No te dejes llevar por tus corazones (plural) y tus ojos”. Pero
¿la persona realmente tiene dos corazones?
Sí. La
lucha moral de la vida parte de dos inclinaciones en conflicto, los
“dos corazones” en cada ser humano. Nuestra alma Divina,
el ietzer tov, quiere hacer todas las cosas correctas: amar a la humanidad,
buscar justicia, ser altruista, sensible, honorable y responsable. Desea
crecer, lograr, y desarrollar su potencial. Finalmente busca
emular y conectarse con su fuente infinita y eterna - El Todopoderoso.
Los seres humanos también
tienen un cuerpo (“alma animal”) llamada ietzer hará. Busca
satisfacción momentánea y escapar al mundo de la comodidad. El
cuerpo quiere comer, dormir, placer. Esta destinado a la
tumba.
Necesitamos concientizarnos
de la lucha que se desata en nuestro interior. De otra forma, lo que
se “siente bien” le va a ganar a lo que es objetivamente bueno y verdadero. Por
ejemplo:
- Tú quieres usar tu tiempo
efectivamente , sin embargo tu deseo es demorarte.
- Tú quieres adquirir sabiduría,
pero deseas ver la T.V.
- Tú quieres comer sanamente,
sin embargo tu deseo es comer dulces en demasía.
El “querer” es algo permanente. Está
enraizado en la realidad. El “deseo” es temporal, por el
momento, con poca preocupación por las consecuencias futuras.
Esa es la razón por
la cual no “te dejes llevar por tu corazón” es una mitzvá
constante. Tienes que saber que estás en una lucha con
el cuerpo. Cada vez que digas, “No se me antoja” estás
perdiendo la lucha. Tu cuerpo es pesado; no se
le antoja moverse.
El reloj despertador se
apaga en la mañana. Quieres levantarte de la cama y
empezar tu día. Pero sientes ganas de romper el botón
y dormirte hasta tarde. Es una lucha de tira y afloja.
Cuidado: El
ietzer hará hace todo tipo de promesas. “Duerme un poco
más. Disfruta de una buena comida. Relájate”. Pero
es una ilusión. Existe un sólo camino para obtener
placer verdadero de este mundo: Ten fuerza y sigue luchando.
¿Cómo es que fortaleces
tu fuerza? Ten placer cuando luchas, porque cuanto más
fuerte luches más recompensa tendrás. Como dicen
nuestros sabios: “De acuerdo al esfuerzo es la recompensa”.
DISTINGUE
ENTRE LOS DOS CORAZONES
Puede ser muy confuso distinguir
cuál es el corazón que habla en cada momento.
Inclusive, mientras estás
leyendo esto, tu alma te está diciendo: “Pon atención - esto
me hará grande!” Pero tu cuerpo te dice: “Toda esta concentración
es muy dolorosa, demasiado esfuerzo. Estoy bien así
como soy!”.
Cada momento de la vida,
en miles de decisiones, tus dos corazones se confrontan. Y
sólo estando del lado de la espiritualidad podrás encontrar
placer duradero. ¿Cómo querrías elogiar a un ser querido? Dirías:
“El Tío Carlos manejó un Lexus precioso, jugó golf en
los campos más finos del mundo y cenó en los restaurantes
más exquisitos”.
Claro que no. Vas
a tratar de decir algo significativo. “Ayudó a otras
personas. Era un buen padre y una persona muy amable”.
Todos saben que puedes
desperdiciar tu vida entera siguiendo al cuerpo, yéndote detrás
de ilusiones, persiguiendo un coche más caro o una casa más
lujosa. Pero al final, es ir a la bancarrota.
No te engañes. Estáte
consciente del conflicto entre lo que realmente “quieres” y los deseos
que se están atravesando en el camino. En cualquier
decisión, pregúntate: “¿Qué es lo que quiere mi alma,
y lo que mi cuerpo desea?”. En el gran juego de la vida,
el perder y el ganar depende de que la voz que grite más fuerte
en el momento de la decisión.
Este es el conflicto entre
el cuerpo y el alma.
EL COCHE
Y EL CHOFER
Si el cuerpo es tan peligroso,
¿cómo podemos lidiar con él? La Torá (Deut. 6; 5) dice
que debemos amar a D-os con “ambos corazones” – el alma Divina y el
cuerpo.
¿Cómo funciona esto?
D-os hizo un mundo físico no para frustrarnos, sino para disfrutarlo. El
Talmud dice que si una persona tiene la oportunidad de probar una fruta
nueva y se rehusa a hacerlo, va a tener que rendir cuentas en el mundo
venidero por eso.
Sin embargo, uno de los
desafíos más difíciles es saber cuánto materialismo
es bueno para ti, y cuánto ya es “demasiado”.
Imagínate esto: el
cuerpo es para el alma, lo que un coche es para el chofer. Tienes
que mantener tu coche mecánicamente y cargarlo con gasolina. Si
abusas del coche, no te va a llevar a donde quieras ir. Y
para que siga viéndose bien tienes que mantenerlo periódicamente
con limpieza, aspirar los interiores etc.
Pero claro, que el coche
no es más importante que el conductor. Alguien que ignora
a su familia y se pasa engrasando su coche por horas ha perdido obviamente
su sentido de la prioridad.
De la misma forma, el cuerpo
y el alma. Algunas veces debes complacer a tu cuerpo, para
que tu alma logre más. Después de que hayas completado
un proyecto difícil, por ejemplo, te puedes recompensar con una
buena cena en un restaurante elegante. Mantén el cuerpo
sintiéndose bien para que el alma pueda pasar los obstáculos
de la vida - la crianza de los hijos, la carrera, cuestiones sociales.
Sólo no complazcas
tus deseos físicos por si mismos. No hagas al materialismo
la meta de tu existencia. Esa es una violación a “no
te dejes guiar por tu corazón”.
ELEVANDO
LO MUNDANO
El nombre del juego es
la disciplina personal, no la opresión. Usa una cantidad
controlada, por las razones adecuadas en los momentos pertinentes.
Cuánto más disciplinado
seas con tus impulsos, más podrás disfrutarlos, porque te
conviertes en un maestro sobre ellos y no vice-versa.
La ilusión de todos
los impulsos es que cuánto más los satisfagas más satisfecho
estarás. Pero en lo que se refiere a impulsos,
especialmente el sexual, cuánto más lo alimentes, más
necesidad tendrá. El sexo por si mismo es degradante,
y puesto que es muy poderoso te puede destruir. Complacerte
sin ningún propósito elevado sólo va a fortalecer tus
placeres y hacer la batalla más fuerte.
Cuando nuestras hormonas
están dirigiendo el show, ya no estamos libres. La primera
cosa que debemos hacer es decidir que nuestra mente es quien va a dictar
nuestras acciones.
No tomes algo que debe
ser espiritual y lo transformes en un deseo animal. La clave
es elevar el mundo físico. El viernes en la noche, levantamos
la copa de vino y la utilizamos – no para emborracharnos - sino para
hacer el kidush y santificar el día.
Cuando se utiliza sabiamente,
el placer físico debe ser un escalón hacia placeres más
elevados.
Cuando nos ocupamos en
cualquier actividad física - comer, dormir, hablar - detente un
momento y pregúntate: ¿Por qué estoy haciendo esto? ¿Cuál
es la meta? ¿Lo estoy haciendo para evadir la realidad, para darme energía
para poder lograr cosas más elevadas? ¿Me va a acercar
más a D-os o me alejará?
¿Qué harías con
una descarga de energía?
Calma las pasiones del
cuerpo para alimentar el propósito del alma. Conéctate
a la agresividad que tienes por el helado o por hacer un millón
de dólares -- para hacer lo que es correcto. La meta
es “sentir” que estamos haciendo lo que es correcto. Así
como correrías por una pizza, utiliza el mismo entusiasmo para
objetivos espirituales. Eso es amar a D-os con ambos corazones.
NO ABUSES
DE TU BUENA INCLINACIÓN
Existe una dimensión
más profunda aquí. Ya que el versículo dice:
“No vayas detrás de tus corazones (plural)” también implica
la posibilidad de ser guiado erróneamente por tu ietzer tov. Pero
¿cómo puedes ser abusado por el iezter tov?
A veces podemos tener un
deseo de hacer lo que es bueno, pero al final cometemos el error de
crear un problema aún más grande. Por ejemplo,
la Torá nos exige dar crítica constructiva: “reprende a tu
prójimo, pero no tomes a bear because of it (Levítico
19;17). La segunda mitad del versículo nos advierte:
“Cuando estés corrigiendo a alguien no lo avergüences ni lo
hagas sentir mal. Si lo tienes que criticar no dejes a tu
ietzer Hara decir, “Yo realmente le enseñaré a esta persona
y lo enderezaré!” Eso es hacer una transgresión en forma de
una mitzva -abusando de tu ietzer Tov.
La Biblia recuenta un error
similar: Jana y Penina eran esposas de Elkana, sin embargo, Penina tenía
hijos y Jana no. Penina quiso ayudarla a que se inspire más para
rezar por un hijo, entonces le decía: “Jana, mira los zapatos que
le compré a mis hijos. ¿Qué le estás comprando
a tus hijos?”.
El plan resultó y
los rezos de Jana resultaron en el nacimiento del profeta Shemuel. Sin
embargo, a pesar de sus buenas intenciones, Penina fue castigada por
causar un dolor emocional a Jana. Las buenas intenciones
fueron anuladas por su pobre ejecución.
“No te dejes llevar por
tu (buen) corazón” - nos advierte cuidarnos de las buenas intenciones
que a veces pueden herir a la gente.
EVITA
SITUACIONES TENTADORAS
Hasta ahora hemos estado
enfocándonos en “ No te dejes guiar por tu corazón”. Ahora
vamos a ver la segunda mitad de esta mitzva, “No te dejes llevar por
tus ojos”.
La sociedad occidental
pone un énfasis muy fuerte a lo visual. Si se
ve bien, debe ser bueno. La prensa nos bombardea con tantas
imágenes visuales, que a veces estamos inconscientes de sus efectos. Pero
seguro que todo eso nos tienta más y más a objetivos no espirituales.
Cuando vemos estas imágenes
y fantaseamos sobre lo maravilloso que la vida seria si “tan sólo
tuviera el producto X”, estamos engañándonos pensando que
el materialismo va a satisfacer nuestros deseos más profundos. Esa
es una violación de no “dejarte llevar por tus ojos”.
Entonces ¿cómo evitamos
esta trampa?
La clave es evitar situaciones
que te tienten. Si estuvieras haciendo una dieta no traerías
un pastel de chocolate a la casa cada día. Simplemente
no te expondrías al desafío.
De la misma forma, si quieres
mantener tu cabeza y tus ojos a donde pertenecen, crea una barda protectora: Evita
la tentación. Evita situaciones comprometedoras en primer
lugar.
La Torá nos está
enseñando algo muy práctico sobre la naturaleza humana: Sólo
porque sepas intelectualmente que algo es erróneo, no te garantizará
que no lo vas a perseguir en un momento de prueba.
NO TRATES
DE SER UN HEROE
A veces tenemos una tendencia
a meternos en situaciones tentadoras, con la idea de que nuestra disciplina
personal va a prevenir cualquier desgracia.
Se cuenta la historia sobre
un rey que entrenaba a un gato para que sirva como mesero. El
rey, para poder mostrar esta increíble hazaña, invitó
a sus ministros a un banquete especial. El gato sirvió
el aperitivo, la sopa y fue recibido con gran aplomo. Todo fue bien
hasta que entró un ratón al salón. El gato
corrió tras el ratón y todos los platos se rompieron.
La enseñanza aquí
es que no importa cuánto trates de controlar tu cuerpo, no puedes
negar totalmente tu ietzer hará. Los impulsos de tu cuerpo son
instintivos y te tientan constantemente. Un joven puede estar
comprometido a metas espirituales elevadas pero cuando una chica bonita
pasa caminando se puede distraer.
Esta, incidentalmente,
es una de las razones principales de la separación de hombres y
mujeres en la sinagoga. La Torá entiende que sólo
somos humanos, y ofrece leyes para asegurar que tu yo verdadero - tu
alma - se quede al mando, al evitar situaciones tentadoras.
Puedes evitar la tentación
al mantener tu mente ocupada completamente con cosas que te interesan. Cuando
tu mente está involucrada en actividades creativas e intelectuales,
vas a estar mucho menos inclinado a satisfacer a tu ojo vagante. “Mirar
a las nenas pasar” es el símbolo principal de una mente ociosa.
Más aún, no sueñes
despierto. Desperdiciar tu poder mental en ilusiones es contraproductivo. Nos
imaginamos el logro, en lugar de realmente salir y hacer algo al respecto. Y
peor aun, crea una “ficción” que probablemente nunca podrás
ser capaz de vivir.
SU VOLUNTAD,
TU VOLUNTAD
El Talmud dice que D-os
llora por dos tipos de personas: una que tiene la habilidad de estudiar
Torá y no lo hace y otro que no puede estudiar Torá y lo hace
de igual forma.
Es entendible por qué
D-os llora por alguien que tiene la habilidad de estudiar y no lo hace
- est persona está perdiendo su tiempo. Pero ¿por qué
D-os llora por alguien que no puede estudiar pero lo hace de todas formas?
Alguien que no puede estudiar
Torá esta recibiendo un mensaje del Todopoderoso que debería
estar haciendo algo más - ayudando a los pobres, visitando a los
enfermos, o tratando de acercar a los que están alejados. Sin
embargo, ¿qué es lo que esta persona hace? Razona, “No
tengo tiempo para todo eso - tengo que estudiar Torá”!
Esta persona está
haciendo un error con su ietzer Tov. En lugar de investigar
lo que el Todopoderoso quiere, está siguiendo sus deseos personales
- así también aquel que debería estudiar y no lo está
haciendo. Está perdiendo su tiempo, no está escuchando
al Todopoderoso!
Más allá de esto,
en el deseo de ser buenos, inclusive podemos tratar de ser “mejores
que D-os”. Inventamos nuestros propios estándares de
bien y mal, en lugar de seguir las instrucciones de la Torá.
Un ejemplo clásico
de esto es el Rey Saúl, quien fue instruido por D-os a destruir
a toda la nación de Amalek. En su deseo de ser “demasiado
bueno” Saúl escogió tener piedad y permitir al rey Agag, el
rey de Amalek, vivir. ¿La consecuencia? Agag perpetuó
la nación de Amalek, quien continua afligiendo al pueblo Judío
hasta el día de hoy.
El profeta dice, Al titzdak
harbeh – “no seas demasiado bueno”. Lo que sea que D-os diga,
esa es la definición de bien. No dejes que tu ietzer
Tov te desvíe haciéndote pensar que tus propias ideas son
mejores.
Una definición adecuada
de “bien” es el punto de partida de todo lo que hagas en la vida. Siempre
pregúntate: ¿Estoy definiendo al “bien” basado en el segmento de
la sociedad cuyos valores son la comida rápida, alta tecnología,
Hollywood, o estoy definiendo el “bien” como aquello que tiene un sentido
profundo y hace una contribución valiosa para incrementar la conciencia
de D-os en el mundo?
Nuestro propósito
en este mundo es vivir con la realidad de que ase ritzono kiretzonja
– “haz la voluntad de D-os, tu voluntad”. Cuando hacemos
la voluntad de D-os algo que es objetivamente significativo y bueno
para nosotros, estamos conectándonos a la fuente de toda la realidad. ¿Qué
meta más increíble que esta puede haber?
Entonces ten cuidado y
mantén tus definiciones derechas. Sino trabajas los
conceptos y los clarificas puedes acabar 20 años después de
emprender el camino dándote cuenta de que trajiste un paquete equivocado.
Cuando sea que estás
en conflicto, enfrentado a una decisión difícil, hazte un
pregunta simple: “¿Qué diría D-os al respecto? Mira
en la Torá para obtener parámetros de cómo interactuar
con amigos, familia y sociedad. Porque si la voluntad de
D-os es tu voluntad, no hay obstáculos en tu camino, no puedes
perder.
LA HUMILDAD
VENCE AL EGO
¿Cuál es el desafío
constante de “No dejarte llevar por tus corazón?” Es la prueba
del ego. La naturaleza humana es vernos como el centro de
todo. “Mi mundo, mis logros, mi crecimiento”.
La gente cree que el ateísmo
está basado en la “evidencia” de ningún D-os. Pero
los sabios explican que el ateísmo es simplemente el resultado
del egoísmo. En lugar de aceptar la existencia del poder
del Todopoderoso, la persona lo niega para poder perseguir aquello que
quiere. En un lugar donde el ego está inflado no hay
lugar para D-os, como dicen nuestros sabios: “ Dejarte llevar por tu
corazón es una negación de D-os”.
La manera de quitar este
sentimiento de auto-importancia es trabajar en nuestra humildad. En
Pirkei Avot, Ben Soma dice:
Concéntrate en tres
cosas y nunca vas a pecar:
- Reconoce de dónde vienes.
- Reconoce a dónde vas, y
- Reconoce delante de Quien tendrás
que rendir cuentas.
Ben Soma continua:
“¿De dónde vienes?”
Mi´tipa sruja - De una “gota pútrida”, que se descompone fácilmente. Esto
nos enfoca al hecho de que a pesar de que vienes de una gota pútrida
también tienes un alma. Tienes la oportunidad de ser
como D-os mismo. Úsalo como inspiración para obtener
grandeza.
“¿A dónde vas?” Lemakom
afar rima vetolaya - “a un lugar de tierra y gusanos”. Sin
el Todopoderoso eres sólo un cuerpo que va a acabar como comida
de gusanos. Tienes una elección. ¿Estás
comprando placeres transitorios que acabaran en la tierra? O ¿estás
entablando una conexión con la eternidad?
“¿Delante de Quien vas
a tener que rendir cuentas?” Lifne Melej maljey Hamelajim - “frente
al Rey de reyes, el “Creador del universo”. Si sigues las
pasiones del cuerpo e ignoras tu lado espiritual ¿cómo vas a justificarte
cuando estés enfrentado con la realidad final - cuando rindas cuentas
delante de D-os?
Si dejas a tu ego tomar
el mando, estás cayendo en la trampa de “No dejarte llevar por
tu corazón y tus ojos”. Pero si utilizas tu mente para
enfocarte puedes ganar. Tómate 10 minutos cada noche
para pensar sobre lo que es la vida, lo que necesitas lograr y cómo
vas en el proceso. Vas a convertirte en alguien grandioso.
LOS
SIETE PASOS PARA LA HUMILDAD
El libro clásico de
ética Judía, “Los deberes del corazón” (Jobot Halevavot)
explica que la “humildad es la habilidad de ver la realidad”. La
persona humilde reconoce que el ego es la trampa del ietzer hará
para distraerlo de la realidad. Por lo tanto, la persona
humilde se identifica con su alma, que es la parte de D-os – la única
realidad.
¿Cómo adquirir esta
realidad? “Jobot Halevavot” presenta 7 pasos:
Paso 1: Pregúntate:
¿Qué parte de mí define quién soy yo? Soy mi cuerpo?
Soy mis manos? Soy mi corazón?
Si a una persona le amputarían
su mano, ¿cambiaría su personalidad básica? Claro que no. Si
alguien tuviera un transplante de corazón, ¿tendría una crisis
de identidad? Claro que no.
El verdadero “yo” no es
tu cuerpo. Es tu alma.
Paso 2: Toma al alma como
tu identidad. Estás creado a la imagen de D-os. Date
cuenta de que la esencia de tu alma está atada eternamente al Todopoderoso,
Creador de este universo.
Paso 3: Ya que tu alma
es parte de D-os mismo, está siempre buscando grandeza. Si
estás deprimido, cansado etc... Ese es tu cuerpo hablando. No
es tu “yo” verdadero. ¿A dónde se va a ir tu cuerpo? A la tierra
con los gusanos. Pero ¿tu alma? Esa es parte de D-os. Usa
este concepto para energizar tu cuerpo. No te identifiques
con “estoy cansado”. Identifícate con estoy destinado a la “grandeza”.
Paso 4: Date cuenta de
que cuando escoges al cuerpo por sobre el alma, te tiras hacia abajo. ¿Cómo
te sientes cuando comes mucho, te duermes muy tarde o pierdes tu temperamento?
Asqueroso!
¿Cómo te sientes cuando
te identificas con tu alma? Elevado. “Hice lo que es correcto!
Trabajé fuerte. Fui responsable”. Identifícate
con lo Divino y el mundo será tuyo.
Paso 5: Aprecia la distancia
cualitativa entre el cuerpo y el alma. El cuerpo es sólo
un pequeños espectro de la humanidad. No podrías
encontrar tu propio cuerpo dentro de la masa de cinco billones de seres
humanos. Más allá de eso, la humanidad es tan sólo
un pequeño espectro de las criaturas del planeta. Y
la tierra del sistema solar. Y el sistema solar del universo.
Entonces ¿qué es tu
cuerpo? Casi nada.
Por el contrario, tu alma
es parte del Todopoderoso, que abarca y trasciende el universo entero. Por
lo tanto, si eres una parte de D-os, eres una parte de todo. Si
la elección está entre tu cuerpo y tu alma, ¿con qué
tiene más sentido identificarse?
Paso 6: reconoce la diferencia
entre tus limitaciones como un cuerpo finito y la naturaleza eterna
de tu alma. Como seres físicos, estamos atados al tiempo. La
duración de la vida humana es vivida de minuto a minuto. Esa
pequeñísima porción de tiempo no es nada en el curso
de la humanidad. Y la historia de la humanidad no es nada
en la edad del universo.
Pero el Todopoderoso no
está limitado al tiempo. (De hecho, Él creo el tiempo). Tu
alma - parte del Todopoderoso – está conectada a esa eternidad.
Paso 7: El logro
más grande en la vida es identificarte con tu alma. El
error más grande es identificarte con tu cuerpo que está destinado
a ser comida para los gusanos.
D-os podría haber
hecho robots, pero no quiere eso. Quiere una relación
real - lo cual significa que tenemos que escogerla.
Cuerpo vs. Alma. ¿Qué
escogerás?
Toma la decisión correcta.
Una decisión consciente. No te pierdas en una bolsa de papas fritas.
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