LA AMIDA (Shmone esrei)
para el día de semana
A-donay abre mis labios y mi boca anunciará Tus loores.
Baruj atá A-DONAY., Dios nuestro y de nuestros padres, Dios de Abraham, Dios de Itzjak y Dios de Iaacob. Dios magno, exaltado y venerado. Dios altísimo, Tu prodigas benevolencia a toda Tu creación, todo Te pertenece, Tu recuerdas, el amor de nuestros patriarcas y redimir has, a sus descendientes, por Tu nombre y por amor a Tu pueblo. Tu Rey nuestro, nos ayudas, salvas y proteges.
Baruj atá A-DONAY, Maguén Abrahám.
Escudo (Protector) de Abrahám.
Tu poder Dios es infinito; Tú revives a los difuntos y posees grandeza para salvar. Tú haces descender el rocío. Tu bondad sustenta a los vivientes, revives a los difuntos con Tu misericordia; alientas a los débiles, curas a los enfermos; Tu liberas a los cautivos y cumples Tu promesa a los que yacen en la tierra. Quién Te iguala, Dios sublime ? Y quién se asemeja a Tí, Rey que decretas la muerte y concedes la vida y haces germinar la salvación. Tu promesa se cumplirá, revivirás a los difuntos.
Baruj atá A-DONAY, mejaié hametím.
Que revive a los difuntos.
Santo eres Tú, y santo es Tu nombre. Y los elevados te profesan veneración eternamente.
Baruj atá A-DONAY, Hael Hakadosh
Dios santo
>> En los dias entre Rosh Hashana y Kipur se dice Hamelej Hakadosh
El Rey santo
Tú dotas al hombre con la sapiencia y le enseñas el discernimiento. Favorécenos, Dios, con la sapiencia, el discernimiento y la inteligencia.
Baruj atá A-DONAY, Jonen hadahat
que nos agracia con el conocimiento
Padre nuestro, haznos retornar a Tu Torá y acercarnos a Tu servicio, Soberano. Haznos arrepentirnos sinceramente ante Tí.
Baruj atá A-DONAY, Harotzé bitshubá.
que desea el arrepentimiento.
Padre nuestro, perdona nuestros errores, absuélvenos de nuestras transgresiones, Soberano. Pues Tú perdonas y absuelves.
Baruj atá A-DONAY, Janún hamarvé lislóaj.
misericordioso que concede el perdón.
Observa nuestra aflicción y vindica nuestra causa, redímenos pronto con redención completa por la gloria de Tu nombre, pues Tú eres el poderoso redentor.
Baruj atá A-DONAY, Goel Israel.
Redentor de Israel.
Cúranos Dios, y entonces seremos sanos, sálvanos y entonces estaremos salvos, pues Tú eres nuestra gloria. Proporciona remedio eficaz a todas nuestras enfermedades, a todos nuestros dolores y a todas nuestras aflicciones; pues Tú eres Dios de curación, de clemencia y confiable.
Baruj atá A-DONAY, Rofé jolé amó Israel.
que sanas a los enfermos de Tu pueblo Israel.
Bendice Dios nuestro todas las obras de nuestras manos y extiende Tu bendición, sobre el presente año con roció, bendición y abundancia. Y que lleguemos al final del año con vida digna, abundancia y paz tal como los años buenos y prósperos. Porque Dios bueno y bondadoso eres Tú, que bendices nuestros años.
Baruj ata A-DONAY, mebaréj hashaním.
que bendice los años.
Toca cual heraldo el gran Shofar de nuestra libertad. Hiza el estandarte que reunirá a nuestros exiliados. Reúnenos desde los confines de la tierra hacia nuestra tierra.
Baruj ata A-DONAY, mecavétz nijdé amo Israel.
que reúne a los dispersos de Su pueblo Israel.
Restaura a nuestros jueces como en tiempos pasados y a nuestros consejeros como antaño. Has desaparecer de nuestra existencia la angustia y la tristeza. Manifiesta prontamente sobre nosotros Tu reino de misericordia, justicia y equidad. Baruj ata A-DONAY, melej ohéb tzedaká umishpat. Rey que ama la justicia y la equidad.
>> En los dias entre Rosh Hashana y Kipur se dice Hamelej Hamishpat
El Rey de la justicia
Frustra los designios de los que nos calumnian y de los infieles, y todos los enemigos se extinga prontamente. Que todos Tus adversarios y los arrogantes desaparezcan rápidamente. Todo aquel que obre el mal inmediatamente sea doblegado, derrotado y abatido, pronto y en nuestros días.
Baruj ata A-DONAY, Shobér oievím umajnía zedím.
que destruye a los enemigos y somete a los arrogantes.
Extiende Tu merced sobre los justos y piadosos, sobre el remanente de Tu pueblo Israel y sobre sus dirigentes, sobre los sobrevivientes de nuestros sabios, sobre los conversos que abrazan Tu fé con sinceridad y sobre nosotros. Recompensa con Tu benevolencia a los que confían en Tí con sinceridad. Haznos participar de su felicidad. No seamos avergonzados, pues en Tí creemos y en Tu gran merced nos apoyamos.
Baruj ata A-DONAY, mishán umibtáj latzadikím.
sostén y esperanza para los justos.
Convierte a Jerusalem Tu ciudad, en la recidencia de Tu gloria, tal como lo prometiste. Restaura en ella el trono de David Tu servidor. Reconstrúyela para la eternidad, prontamente y en nuestros días.
Baruj ata A-DONAY, boné Ierushalaim.
que reconstruye Ierushalaim.
Has brotar el retoño de David Tu servidor; su honor elevarás con Tu salvación, pues en ella estamos esperanzados constantemente.
Baruj ata A-DONAY,matzmíaj kéren ieshuá.
que hace brotar la salvación.
Oye nuestras invocaciones, Dios nuestro, padre misericordioso, extiende sobre nosotros Tu clemencia y compasión. Acepta con Tu benevolencia y voluntad nuestra oración; pues Tu Dios, oyes oraciones y plegarias. No nos hagas tornar vacíos de ante Tí. No desoigas nuestras invocaciones, pues las oraciones de toda boca Tu escuchas.
Baruj ata A-DONAY, shoméa tefilá.
que oye las plegarias.
Complácete, A-DONAY, Dios nuestro, con Tu pueblo Israel y acepta sus oraciones. Restaura el servicio en Tu santuario y recibe con amor las plegarias de Tu pueblo Israel. Y el culto de Tu pueblo Israel Te sea grato siempre.
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• En Rosh Jodesh y los días intermedios de Pesaj y Sucot se intercala:
Dios nuestro y Dios de nuestros padres, has que se eleve hacia Tí, sea escuchado y acepto, y llegue hacia Tí nuestro recuerdo y el de nuestros patriarcas; recuerda a Ierushalaim, Tu ciudad; recuerda al Mesias de la dinastía de David; recuerda a todos los componentes de Tu pueblo Israel y concédenos salvación y bondad, gracia y misericordia en este día de:
* Rosh Jodesh * Pesaj, día consagrado
* Sucot, día consagrado
para apiadarte de nosotros y salvarnos. Recuérdanos, Dios nuestro, para el bien, bendícenos y rescátanos para una vida buena. Y con palabras de salvación y misericordia concédenos Tu gracia y compasión, apiádate de nosotros y acude en nuestro socorro, porque hacia Ti elevamos nuestros ojos, Dios y Rey lleno de gracia y misericordia.
Y Tú con Tus grandes piedades, complácete en nosotros y favorécenos. Has que nuestros ojos presencien Tu retorno a Sión.
Baruj ata A-DONAY, hamajazír shejinató lesión.
que restaura Su gloria en Sión.
Reconocemos, Señor, que Tu eres Dios nuestro y Dios de nuestros padres hasta la eternidad. Tu eres nuestra fortaleza, Tu cuidas nuestra existencia y proteges nuestra vida a través de los tiempos. Te agradecemos y te alabaremos, por nuestra vida que de Ti depende y por nuestras almas encomendadas a Ti, por los milagros que cada día haces para nosotros, por las maravillas y las bondades que nos prodigas en todo momento, mañana, tarde y noche. Bondadoso cuya misericordia es infinita, Piadoso que nunca se acaba Su merced; por lo que nuestra esperanza estará siempre puesta en Ti.
(en Janucá y Purím se agrega aquí la parte correspondiente).
Por todos estos actos es enaltecido, exaltado y ensalzado Tu nombre eternamente, Rey nuestro. Todo ser viviente te alabará por siempre. Te bendecirán y rendirán homenaje a Tu gran Nombre con sinceridad eternamente, Dios artífice de nuestra salvación y de nuestra ayuda por siempre.
Baruj ata A-DONAY, hatób shimjá ulejá naé leodót.
pues bondad es Tu nombre y digno de alabanzas.
Concédenos la paz, el bienestar y la bendición, la vida la piedad y la gracia, la justicia y la misericordia, a nosotros y a todo tu pueblo Israel. Bendícenos, padre nuestro, e ilumínanos con Tu presencia, porque con esa luz nos proporcionaste, Dios nuestro, la Torá y la vida, el amor y la benevolencia, justicia y misericordia, bendición y paz. Plázcate, Dios, bendecirnos y bendecir a todo Tu pueblo Israel con fortaleza y paz.
Baruj ata A-DONAY, Hamebaréj et hamó Israel beshalóm. (amen)
que bendice a Su pueblo Israel con la paz. (amen)
Dios mío, preserva mi lengua de la calumnia y mis labios de la mentira. Hazme insensible a la ofensa y ante los que me maldicen, mi alma permanezca silenciosa. Hazme humilde ante mi prójimo, y sea mi alma humilde para todo como el polvo de la tierra. Abre mi corazón a Tu Torá y que todo mi ser vaya en pos de Tus preceptos. Disipa las malas intenciones de mis enemigos, frustra sus malos pensamientos, que sean tan débiles como una hoja que es arrastrada por el viento, y el enviado de Dios los desplace. Hazlo por Tu nombre, por Tu gloria, por Tu Tora, por Tu santidad; para que lo vean y se regocijen Tus amados. Extiende Tu diestra y respóndeme A-DONAY, mi protector y redentor.
Sean gratas las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón delante de Ti Dios Eterno.
El que establece la armonía en sus alturas nos conceda la paz a nosotros y a todo Tu pueblo Israel. Amen.