El Día del Juicio
En el Talmud Babilónico (Rosh Hashaná 16a) la Mishná nos enseña:
"En Rosh Hashaná todas las criaturas pasan delante de Él como miembros de un rebaño…".
De aquí aprendemos que el día de Rosh Hashaná no es simplemente el comienzo del año sino que también es un día en el cual D'os juzga al mundo, y es por eso que a este día se lo llama también: Iom Hadin - El Día del Juicio. Esto también está representado en el cielo, ya que el signo zodiacal del mes de Tishrí es el signo de Libra, que es una balanza con dos platos donde en uno D'os coloca los méritos de la persona - sus mitzvot y buenas acciones - y en el otro sus pecados y transgresiones. (Nótese que Rosh Hashaná siempre cae en los meses septiembre-octubre).
La pregunta que podemos formular es: ¿Por qué D'os decidió juzgar al mundo precisamente en Rosh Hashaná y no en cualquier otro día o momento del año?
En nuestro texto "¿Qué es Rosh Hashaná?" hemos explicado que, acorde a una opinión del Talmud, nosotros somos juzgados en Rosh Hashaná porque también Adam, el primer hombre, fue juzgado en Rosh Hashaná. Sin embargo, acorde con la otra opinión citada en el Talmud, que sostiene que el mundo no fue creado en el mes de Tishrí, todavía debemos explicar por qué D'os eligió precisamente este día para juzgar a las personas.
La Misericordia en el Juicio
Como todos sabemos, algunos días después de haber recibido la Torá en el monte Sinai, el pueblo de Israel, al pensar que Moshé había muerto en la montaña, construyó un becerro de oro. Entonces, Moshé Rabenu descendió con las tablas de piedra que contenían los Diez Mandamientos y las rompió a ojos del pueblo. En ese momento D'os quiso destruir al pueblo, y al ver esto, Moshé se abocó a rezar para que D'os los perdone. Finalmente, después de muchos días de rezos y súplicas, D'os perdonó al pueblo de Israel por el pecado del becerro de oro, en lo que fue el primer Iom Kipur de la historia, y ese día fue consagrado para todas las generaciones como un día de perdón para el pueblo de Israel.
El Rav Rabenu Nisim (España, 1308 - 1376) nos explica que de acuerdo con la opinión que sostiene que el mundo no fue creado en Tishrí, la razón por la cual D'os dispuso que precisamente en este día seamos juzgados, es porque D'os quiso que el pueblo de Israel tenga méritos en el juicio, y por eso decidió juzgarlos precisamente en una época que fue consagrada al perdón y la expiación.
Es por eso que D'os decretó que el hombre sea juzgado en Rosh Hashaná. En Rosh Hashaná los justos son inscriptos y sellados inmediatamente para la vida. Pero los intermedios - quienes poseen mitzvot pero también transgresiones - no son sellados en Rosh Hashaná, sino que su veredicto queda pendiente hasta Iom Kipur, que es un día de perdón y expiación. Y por eso es que la Torá les dió a los hijos de Israel un tiempo para que revisen sus acciones y hagan teshuvá antes de Iom Kipur: los diez días entre Rosh Hashaná y el día de Iom Kipur.
Cómo Hacer Para Ser Meritorios en el Juicio
Los Sabios en el Talmud nos enseñan que la persona siempre debe verse a sí mismo como si él fuera medio culpable y medio meritorio, como si su balanza estuviera equilibrada justo en el medio. Si hace una mitzvá, feliz es él!, pues inclinó la balanza para el lado del mérito; mas si transgrede una prohibición, pobre de él!, pues inclinó la balanza para el lado de la culpabilidad (Kidushín 40b).
Pero si nos quedamos sin hacer nada - ni una mitzvá ni una transgresión - esa pasividad no nos ayudará en el día del juicio ya que todavía no inclinamos la balanza hacia el lado de los méritos, y aún más, puede ser que esa pasividad sea considerada como indiferencia, y nos sea agregado un pecado más del lado opuesto, inclinando nuestra balanza hacia el lado de las transgresiones.
Entonces, ¿qué debemos hacer?
Debemos hacer teshuvá, es decir, arrepentirnos de nuestras malas acciones.
Hay tres componentes fundamentales dentro del proceso del arrepentimiento: primero se debe abandonar el pecado, luego la persona debe arrepentirse, y por último, él debe confesar sus culpas delante de D'os.
¿Qué significa "abandonar el pecado"? Que el pecador decida no cometer ese pecado nuevamente y que remueva totalmente el pecado de sus pensamientos.
¿Qué significa "arrepentirse"? Que entienda con todo su corazón que abandonar a D'os es amargo y malo para él; que el transgredir la voluntad de D'os conllevará un castigo, y por eso debe arrepentirse de lo que hizo.
¿Qué significa "confesarse"? Que admita verbalmente delante de D'os (no de otra persona) todo lo que ha hecho, diciendo: "Yo he pecado delante de Ti haciendo tal y tal cosa, pero yo me arrepiento de todo lo que hice; estoy avergonzado de ello, y nunca más haré esto nuevamente".
Sin embargo, arrepentirse solamente "delante de D'os" no alcanza. Nos ha sido enseñado que el arrepentimiento delante de D'os sólo es eficaz respecto de los pecados entre el hombre y D'os, ya que las faltas entre el hombre y su prójimo - como robar o hablar mal del otro causándole daño, etc. - no serán perdonadas por D'os hasta que uno no repare el daño que le causó a su prójimo, y también le pida perdón.
Por otro lado, a pesar de que es verdad que no alcanza con reparar la falta, sino que también es obligación pedirle perdón al prójimo, la persona a la cual le están pidiendo su perdón tiene prohibido endurecer su corazón y rechazar una reconciliación con la persona que le ha hecho algo. Debemos intentar perdonar rápidamente al otro, a la vez que también debemos tardar mucho en enojarnos. Además, cuando se nos pide perdón debemos perdonar de todo corazón, incluso si la otra persona nos ha causado mucha angustia, ya que no debemos ser vengativos ni guardar rencor.
Y si nosotros no seremos vengativos con nuestro prójimo o nuestros familiares, ni les guardaremos rencor, sino que les perdonaremos con todo nuestro corazón aunque ellos no se lo merezcan, entonces D'os, que siempre juzga a la personas midá kenégued midá - es decir, recompensando o castigando de manera similar a la buena acción o a la falta - como recompensa por esa buena acción de nuestra parte, también nos perdonará aunque nosotros no lo merezcamos. Amén.
Que seamos inscriptos para la vida, nosotros y todo Israel!!!