Tzedaká es la mitzvá de nuestra generación

Cuando se habla de tzedaká, la Torá no solo dice que debes dar, sino que "da, darás" (duplica la palabra). No debemos dar simplemente una vez para satisfacer nuestra obligación, sino que debemos dar una y otra vez, tanto como sea necesario. Y la Torá advierte: 'No dejes que tu corazón se sienta mal cuando das'.

La Torá espera que demos, no una cantidad que se sienta cómoda, sino una suma tan grande que nuestros corazones naturalmente se estremecerían. Y luego la Torá exige: 'Sin embargo, ¡no dejes que tu corazón se sienta mal!' Nuestra generación está especialmente relacionada con la mitzvá de tzedaká porque tenemos que traer el Mashíaj y “Tzion será redimida por la justicia y sus cautivos con tzedaká [1]”.

Cada uno de los Avot -patriarcas- representa otro de los pilares sobre los que se asienta el mundo [2]: Avraham representa gemilut jasadim -buenas acciones, Yitzchak la avodah -la tefilah- como lo llaman nuestros sabios, es el trabajo del corazón. Y Yaakov la Torah.
Si bien mencionamos los tres nombres de nuestros patriarcas - los Avot- en la primera berajá de Shemoneh Esreh, la concluimos con el nombre de Avraham, simbolizando que la "historia" concluirá con éxito con la llegada de Mashiaj en el mérito de la middah - de la virtud de Avraham: la miseriordia y las buenas acciones.

Si bien no podemos tener en cuenta a las generaciones anteriores y compararlas con nosotros, si medimos la calidad de nuestra Torá, la tefilá y otras mitzvot, sin enbargo  en el área de la tzedaká, la caridad, nuestra generación puede estar orgullosa; en ninguna generación se acerco en términos de volumen, de cantidad a nuestra tzedaká y jesed. (millones de dólares son repartidos diariamente por benefactores para soportar a familias y a necesitados de Israel, a las Yeshivot y kollelim asi como a instituciones de caridad).
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[1] Yeshaya 1:27. [2] Mishne, Avos 1: 2.