10 formas de casarse con la persona equivocada

No sé en que etapa de la vida te encuentras. Si tienes menos de 20 años de edad, es comprensible que tomes este escrito con cierta indulgencia. Si tienes entre 20 y 22, probablemente lo tomes con cautela. Y si tienes ya pareja o mas de 22 años estoy seguro que lo tomarás con seriedad. ¿Por qué? Porque con un porcentaje de divorcios mayor al 50% en el mundo occidental (sin contar las parejas que se separan después de convivir un tiempo juntos ni los noviazgos rotos), podemos afirmar que muchos están cometiendo un grave error al decidir con quién van a compartir el resto de sus vidas. A su vez, el  número creciente de fracasos familiares entre los judíos testimonia el lamentable hecho que no estamos nosotros inmunes a este problema.

Por ello, decidí ahondar en este artículo escrito hace varios años por el Rab Dov Heler y adaptarlo a nuestros días y lectores.

Es mi noble deseo que las parejas jóvenes no sean parte de estas estadísticas e internalicen estos 10 principios que, sin lugar a dudas, son efectivos.

1. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE NO COMPARTES OBJETIVOS DE VIDA SEMEJANTES

      El matrimonio es el evento más trascendente de un hombre y una mujer, dejando una impresión indeleble sobre toda la vida. Tal decisión requiere ser pensada y no puede ser tomada apresuradamente; en consecuencia, debes asegurarte de compartir el nivel más profundo de conexión que es el de identificarse con objetivos de vida similares. Es decir, sobre el materialismo, cosmovisión sobre la familia, espiritualidad, etc. A su vez, si la mujer es profesional o piensa trabajar fuera de la casa, convendría discutir sobre cuáles son las posturas sobre el ambiente laboral en el que se desenvolverá, el embarazo, hijos y el cuidado de los mismos. También es fundamental conocer de ante mano en qué país o ciudad se quiere vivir y comunidad judía a la cual se quiere pertenecer.

      Existen numerosos tipos y formas de incompatibilidad, pero esta es la más severa. Por ello, lo mejor es saber el "para qué viven" mientras están solteros. Después de aclarar cada uno esto, deben buscar a alguien que tenga las mismas ideas e idiosincrasia. Así llegamos a la verdadera definición de "alma gemela"; ósea, un compañero de objetivos, dos personas que compartirán el mismo entendimiento y prioridades de la vida y por lo tanto juntos lucharán por conseguir dichas metas. Esto no excluye, por supuesto, que también debe haber una atracción física, pero sí excluye definitivamente al casamiento mixto ya que como judíos que somos no podemos bajo ningún punto de vista tolerarlo o aprobarlo.

2. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE ELIGES A ALGUIEN CON QUIEN NO TE SIENTES EMOCIONALMENTE ESTABLE

Hazte a solas las siguientes preguntas: ¿Me siento calmado, en paz y relajado con esta persona? ¿Me hace sentir bien sobre mí mismo? ¿Puedo expresarme por completo y ser yo mismo? ¿Temo de esta persona de cualquier forma posible? Si sientes que tienes que monitorear lo que dices o tienes miedo de mostrar tus emociones y opiniones abiertamente, hay un problema en la relación. De todas maneras, no siempre es inteligente decir absolutamente todo lo que piensas. Una cosa es mentir, otra es ocultar y allá, muy lejos, es saber cuándo callar.

Otro aspecto de sentirte tranquilo es que no estén tratando de controlarte. Esto no significa que se preocupen o quieran interesarse por tus cosas, o alguien que te da una sugerencia, ya que esto es para tu beneficio, pero por lo general comportamientos o exclamaciones desubicadas que controlan, evalúan y manipulan son signos de una persona abusiva.

Cualquier cosa que te moleste sobre la relación debe ser hablada antes del casamiento. Dialogar sobre temas incómodos es la única forma de evaluar cómo los dos se comunican, negocian y trabajan unidos. A lo largo de la vida surgen dificultades inevitables, y ¿cómo serán encaradas si no pueden resolver ahora maduramente las diferencias y llegar a un acuerdo justo y mutuo que sirva para los dos? En este caso es recomendable que haya una persona experimentada en la cual confíen para exponerle cualquier duda y que con sus conocimientos pueda orientarlos de la mejor manera posible.

  3. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE ESPERAS QUE ELLA CAMBIE DESPUES DE HABERSE CASADO

El error clásico. Nunca te cases con el potencial. La regla de oro es: si no estás contento como es tu pareja así como ella es ahora, no te cases. Por ejemplo, si no es lo suficientemente encantadora para tu gusto, nadie te asegura que luego lo será. Tampoco esperes que baje de peso, se vista mejor, deje de decir groserías, de fumar, etc.

Como dijimos, debes recibir y estar conforme con "todo el paquete". Una persona no llega sola al matrimonio, sino con una serie de acompañantes los cuales debes estar seguro que puedes convivir con ellos en el estado en que se encuentran HOY. Nos referimos al carácter, espiritualidad, modales, formas de comunicación, hábitos personales, higiene, cultura general, posición socioeconómica, situación familiar, etc.

Con esto no pretendemos decir que uno debe buscar al humano perfecto ya que uno mismo no lo es y tampoco lo hallará en otro, sino que se intente evaluar lo más objetivamente posible si puede convivir y aceptar a esta persona con sus defectos y virtudes. En realidad, es imposible saber con exactitud cómo se desarrollarán las cosas en el futuro, pero si los aspectos esenciales son satisfactorios, entonces se debe seguir adelante y si no, se deberá ser paciente y seguir esperando.

Si hubiera liberales entre los lectores, quienes temen asumir las obligaciones y compromisos que trae aparejado la celebración del casamiento, pero pese a ello desean hacer la prueba de construir un pseudo hogar, deben saber que el hecho de convivir previo al casamiento propiamente dicho, según todos los estudios realizados, aumenta el porcentaje de los divorcios en caso de que en el futuro se casen.

4. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE QUIERES RECIBIR EN LUGAR DE  DAR

En realidad, para esta persona no habrá pareja que no sea equivocada ya que el principal "equivocado" es él/ella. Demás está explicar que sucede cuando son los dos los interesados en sacar y acaparar del otro. Hay casos excepcionales que podría funcionar esta "sociedad" como por ejemplo que el esposo necesite una atractiva compañía dentro y fuera de la casa y la dama una buena billetera, un cómodo asiento en un auto lujoso y el pasaporte con muchos sellos… De todas maneras, este tipo de relación es una bomba de tiempo, vacía, falsa y muy lejana de  ser amor real.

Lo ideal es casarse NO para que te hagan feliz, sino para hacer feliz. Hay consejeros matrimoniales que sostienen que el matrimonio perfecto consiste en dar 50% y recibir 50%. Mas el pensamiento judío difiere. Para nosotros, la obligación el esposo es dar el 100%... Y también de la esposa. El mundo enseña que se ama a la persona que nos da, La realidad es que amamos a quienes les damos de todo corazón.

Una vez que comprendamos y pongamos en práctica estos conceptos podremos apreciar el potencial que hay en un matrimonio judío bien conformado.

5. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE UTILIZAS A LA RELACION COMO UN ESCAPE A TU SITUACION ACTUAL, PROBLEMAS PERSONALES Y/O INFELICIDAD

Si eres infeliz cuando aún estás soltero, lo más seguro es que lo serás cuando te cases también. El matrimonio no arregla problemas emocionales, personales, o psicológicos, sino por el contrario solo puede llegar a incrementarlos y agudizarlos.

Si no estás contento y conforme contigo mismo y con tu vida en general, toma la responsabilidad de arreglarla mientras todavía este soltero. No derives a otros lo que es tu obligación hacer. Este período preparatorio servirá como cimiento para el resto de tu vida y esa reconstrucción personal te hará sentir mejor y verás como tu cónyuge lo percibirá a lo largo de la relación. Para esto puedes acercarte a consultar a alguien de confianza para que te ayude a ver tus virtudes, defectos, maduración y qué es lo que obligatoriamente debes cambiar HOY y qué es lo que puede hacerse en un proceso más largo y en forma paulatina.

El casamiento y el formar un hogar judío son parte de los fundamentos mismos de nuestro credo y no fue creado para tapar huecos como la soledad, aburrimiento, problemas económicos, escape de la casa de los padres, o necesidades hormonales. Sino para construir de a dos una forma más elevada de servir a Dios y traer nuevas almas judías al mundo.

6. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE TIENES RELACIONES PREMATRIMONIALES CON ELLA

No es indispensable probarlo para darte cuenta que son intimamente compatibles. Si haces tú tarea y te das cuenta que pegan en lo intelectual y emocional no tienes que preocuparte de lo físico. Obviamente, se tienen que gustar y atraer ya que la química enciende el fuego, pero la personalidad es lo que lo mantiene quemando. Cabe destacar que en las relaciones largas (más de algunos meses) o en las que los novios no se cuidan de tocarse ni siquiera la mano (shomer neguiá) este tema es un gran escollo por motivos obvios.

Ten cuidado, a su vez, con el síndrome de "estoy enamorado/a" ya que por lo general durante el noviazgo significa "tengo deseo" o "estoy enamorado del amor". Y todavía más, el énfasis bíblico del compañerismo en el matrimonio no implica una preferencia por una relación Platónica entre el hombre y la mujer, sino crear un ambiente familiar, estable, cálido, tranquilo, armonioso y satisfactorio entre los conyugues y posteriormente con los hijos. Se necesita mucho más que "romanticismo" para crear un matrimonio exitoso. La experiencia de amor verdadero de la pareja crece y se desarrolla a medida que ambos lo nutren en el transcurso de su vida. Es necesario aclarar, que la excepcional experiencia de "amor a primera vista" constituye una ilustración de la intensidad y solidez que también alcanza eventualmente el amor progresivo. Esas pocas parejas que sí experimentaron amor a primera vista deben sentirse afortunados que su relación haya sido bendecida con tal sentimiento desde el principio. De todas maneras, si no contiene las semillas y madurez de amor estable, probablemente no sea más que un encantamiento que se disipará tan rápidamente como apareció.

Otro punto esencial que tenemos que aclarar es que en el caso que uno o los dos miembros de la pareja no sean vírgenes, deberán sincerarse con uno mismo y con el otro si es que pueden aceptar el pasado para poder construir juntos un futuro feliz sin remordimientos ni rencores. Y recuerda este gran consejo: cuanto más joven te cases y menos conozcas y sepas del tema mejor (por más que parezcas un extraterrestre en nuestra sociedad). Las comparaciones y falsas expectativas son un cuchillo muy filoso que por lo general sólo causa heridas a la pareja actual. Y en el caso que sí haya habido una relación sentimental, en la medida de lo posible, no recordar ni hablar de ella por más insignificante que haya sido para ti. También pienso que sería buena idea, para evitar malos entendidos y posibles entrometidos, cancelar las cuentas en las redes sociales de ambos.

7. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE NO HAS INVESTIGADO BIEN SU CARÁCTER

Antes de casarse es necesario hacer averiguaciones inquiriendo en varios detalles. A continuación exponemos algunas cualidades básicas que definitivamente tienes que revisar:

- Humildad: ¿Acaso esta persona piensa que "hacer lo correcto" es más importante que la "comodidad personal"? ¿Acaso cree que puede llevarse el mundo por delante? ¿Habla seguido mal de los demás? ¿Respeta a los mayores?

- Bondad: ¿Ayuda a los demás? ¿Es altruista? ¿Hace algún trabajo voluntario?

- Responsabilidad: ¿Puedo confiar en ella? ¿El proyecto que comienza lo termina o deja todo por la mitad?¿Estudia? ¿Trabaja?

- Felicidad: ¿Esta persona se quiere a sí misma? ¿Disfruta de la vida? ¿Tiene amigos? ¿Es emocionalmente estable? ¿Cómo se lleva con su familia? ¿Ve al mundo de una manera positiva o negativa?

- Enojo: ¿Puede controlarse en momentos de tensión? ¿Hiere con hechos o palabras cuando las cosas no salen como ella quiere? ¿Vive con rencor?

- Envidia: ¿Esta feliz con lo que tiene? ¿Se pone mal si otro es mas posee más que ella? ¿Se dedica a compararse con los demás o se preocupa por mejorar ella misma

8. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE ELLA O TU MISMO SON PARTE DE UN TRIANGULO

Ser parte de un triángulo significa que la persona emocionalmente depende de algo o alguien mientras trata de desarrollar otra relación. Alguien que no se ha separado lo sano y suficiente de sus padres, o de los amigos, o de una relación sentimental del pasado son los ejemplos clásicos de una relación triangular. A su vez la gente que no puede salir de adicciones tóxicas como las drogas y el alcohol, o no tóxicas como las apuestas, computadoras, internet, pasatiempos, etc. lamentablemente no está apta para formar una pareja estable.

En todos estos casos se demanda sacrificio y hay que trabajar duro, buscar ayuda profesional si es necesario y quedar libre completamente para tener éxito en el hogar que se ansia construir.

9. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE TE PRESIONAN A HACERLO EN CONTRA DE TU VOLUNTAD

El error en la elección de la pareja, en la mayoría de los casos, representa la infelicidad de la vida o por lo menos de largos años sin posibilidad de corrección, entonces debes asegurarte que  realmente deseas casarte con esta persona y no que alguien o algo externo a tu corazón y raciocinio te está obligando. A veces, inclusive que sean bien intencionados, padres, familiares, amigos, conocidos, o quien sea presionan de tal manera que no dan opción a decir NO. ¿Y qué hay de la pareja misma? También puede pasar, hasta que en el peor de los casos se han escuchado amenazas de suicido o muerte si no se casan.

 No nos referimos a que hay que estar 100 % enamorado y seguro sin ninguna duda de que es tu " media naranja" ya que es una aspiración irreal por la cual muchas personas se han quedado solteras toda la vida esperando ese príncipe azul o princesa de ensueño que nunca llegó. Sino saber que uno mismo está optando la decisión más importante de la vida la cual repercutirá por el resto de sus días no solo en este mundo sino también en el venidero.

Aclaramos que aconsejarse con los padres o alguna persona mayor de confianza no está mal. Tal vez se necesita " un empujoncito" y ellos gracias a su experiencia y visión más objetiva, son los que ayudan a dar el paso.

10. TE CASAS CON LA PERSONA EQUIVOCADA PORQUE ALGUNO DE LOS DOS OCULTO O MINTIO EN TEMAS BASICOS

Nos referimos con esto a temas relevantes e importantes como si hubo o hay enfermedades físicas o mentales graves en alguno de los novios. Así también es obligatorio informar de antemano si uno es convertido al judaísmo o si es adoptado, tiene deudas pendientes, juicios penales, casamientos previos, hijos, etc.

El matrimonio es el comienzo de una unión en la que ambas partes se vuelven uno, por ello el que va con la verdad nunca pierde. Y en el caso que el otro no pueda aceptar la situación por la razón que fuere es mejor que se disuelva todo ahora y no después de haber pasado por la "Jupá", firmado la "Ketubá" y haber puesto el anillo.

CONCLUSION

Con la comprensión de que el hogar es el centro de la vida judía, para uno y para los hijos, el cuidado en la buena elección de la pareja debería ser evidente. Cuando los cónyugues se encaminan juntos hacia la misma finalidad en la vida, se puede esperar que los medios, en conjunto y con la ayuda de Diós los ayuden a llegar a la meta deseada. Y sin lugar a dudas que todo comienza cuando estamos buscando a dicha preciada compañía.

 

Rab Israel Golocovsky

igoloc@gmail.com