¡BUEN DÍA! ¡Janucá está llegando! La primera noche es el Jueves 7 de Diciembre.

Para mí, es mi festividad favorita. Después de que encendemos las velas, cantamos la canción Maóz Tsur, comemos deliciosos 'sufganiot', contamos historias, hacemos preguntas sobre janucá - todo a la luz de las velas de Janucá. ¡Reúne a tus hijos, amigos y familiares y disfruta!

Crear niños es quizás el único trabajo que, con el paso del tiempo y el aumento de la experiencia, se pierde el "empleo". Incluso la mejor de las intenciones y los mejores planes, a veces, acaban en resultados inesperados. Un amigo una vez me contó cómo daba a sus hijas una semana, digamos  $ 3,00,  dos para guardar o gastar y uno para dar tsedaká (caridad). Cuando las muchachas empezaron a trabajar y ganar su propio dinero, y entonces, debían dar el 10% para tsedaká, esta obligación se haría algo muy fácil para ellas.

Me quedé tan impresionado con la idea, que decidí intentarla con mi hijo de 5 años. Por varias semanas le di 3 brillantes moeditas: dos para gastar o guardar y la tercera para colocar en la cajita de tsedaká. Todo iba muy bien, hasta que un día alguien le dio  $ 10,00 de cumpleaños y le dije que debía dar $ 1,00 para tsedaká. El chico estralló: "¿Qué quiere decir con esto? Siempre he dado una moedita a tsedaká, ¿por qué ahora voy a dar un dólar?"

Se ha dicho que los padres deben a los hijos solamente 3 cosas: ejemplo, ejemplo y ejemplo.

Tal vez el siguiente cuadro nos dé un nuevo enfoque sobre cómo los niños aprenden de nosotros:

Si un niño vive ...

Si un niño vive en medio de críticas - aprende a condenar.
Si un niño vive en medio de hostilidades - aprende a pelear.
Si un niño vive con miedo - aprende a ser asustadizo
Si un niño vive en medio de la envidia -  aprende a sentirse culpable.
Si un niño vive en medio de la tolerancia - aprende a ser paciente.
Si un niño vive con aliento-  aprende a ser confiado.
Si un niño vive en medio de elogios - aprende a ser reconocido.
Si un niño vive con aprobación - aprende a ser confiado.
Si un niño vive con aceptación -  aprende a gustar de sí mismo.
Si un niño vive con reconocimiento -  aprende que es bueno tener una meta.
Si un niño vive en medio de la honestidad - aprende lo que es la verdad.
Si un niño vive con buena fe - aprende lo que es justicia.
Si un niño vive con seguridad - aprende a confiar en sí mismo y en los demás.
Si un niño vive en medio de la amistad - aprende que el mundo es un buen lugar para vivir.

¿Cómo viven tus hijos?

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Parashát HaShavúa: Vaieshev - Bereshit (Génesis) 37:01 - 40:23

Esta porción semanal incluye cuatro historias:
1) la venta de Yossef (José) por sus hermanos, lo que al final llevó a Yossef a convertirse en el segundo de la jerarquía egipcia, salvando a toda la población en aquella época del hambre.
2) La indiscreción de Yehuda con Tamar.
3) El intento de seducción de Yossef por la esposa de Potifár, que acabó causando la prisión de Yossef en la cárcel de Ejipto.
4) Yossef interpreta los sueños de sus compañeros de celda, uno el ministro responsable de los vinos y el otro el ministro responsable de la panadería del palacio real.

Dvar Torá: basado en el libro Love Your Neighbor, del rabino Zelig Pliskin

La Torá declara: "E Israel (Israel fue el nombre dado a Yaácov (Jacob) después que luchó con el ángel) amaba a Yossef más que a todos los demás hijos, porque era el hijo nacido en su vejez y le hizo una chaqueta de franjas de muchos colores (Bereshit 37: 3). ¿Qué podemos aprender sobre el cómo criar a nuestros hijos a partir de este versículo?

El Talmud en el Tratado Shabat página 10b, comenta sobre este versículo que un padre nunca debe favorecer mas a un hijo en relación al otro. Cuando Yaácov dio la chaqueta colorida a Yossef, los otros hermanos se pusieron celosos. La consecuencia final de esto fue que nuestros antepasados tuvieron que bajar a Egipto y allí fueron esclavizados.

Los padres deben estar siempre alertas para que sus palabras o actos no causan celos entre los hijos. Las consecuencias de los celos y la envidia entre hijos e hijas pueden ser trágicas; debemos tomar todo el cuidado para evitar hacer cualquier cosa que pueda generarlas. Una afirmaciones como "¿Por qué no estudias como tu hermano?" O "¿Por qué no estás  comportandote bien  como tu hermana?" Están destinadas a causar desentendimientos y pesares.

Algunos padres pueden pensar que sus niños aman y se respetan unos a otros, hasta el punto de que no pueden sentirse celosos el uno del otro. Sin embargo, no demostrar públicamente cierto celos no significa que la envidia no esté presente.

Tratemos a nuestros hijos con sentido común y amor. El cuadro en la página anterior es una buena sugerencia para aprender de dónde empezar.