En hebreo hay una palabra ? MIKREH - que se traduce ?casualidad? esta palabra tiene una raíz en común con la palabra SHEKER que significa mentira. En otras palabras nosotros no creemos en coincidencias. Las letras de la palabra MIKREH también son las iniciales de RAK ME HASHEM ? sólo (viene) de Di-s.
Esta narración es un ejemplo vivo de lo que anteriormente expusimos, sucedió, no es un cuento, lo vivimos y conocemos a los protagonistas. Por razones de privacidad, hemos cambiado sus nombres al igual que los lugares.
Miriam es una ?ola jadashá?, una nueva inmigrante, vive en una pequeña ciudad en el norte de Israel, casada, con un hijo, y esperando el segundo. Como otros en las mismas condiciones, no hablan el idioma y poco saben de la mentalidad israelí. Durante los últimos días del embarazo estaba muy preocupada. No sabía como se podría arreglar sola en el hospital sin saber hebreo.
Sara una mujer de la ciudad de Modiin tuvo familia. El día anterior al nacimiento le llevaron un rezo especial para tener un buen parto. Lea, su amiga de Bne Brak, que hablaba castellano, la fue a visitar. En esta oportunidad Sara aprovecho para pedirle que entregara esta plegaria a Rajel que vivía en su misma ciudad y que iba a dar a luz en los próximos días.
Días después, Lea se encontró con la madre de Rajel en un evento; pero por esas ?coincidencias de la vida?, se olvido de entregarle la plegaria. En ese mismo lugar se encontró con la madre de otra amiga que le contó que su hija había sido operada y estaba internada en el hospital ?X?. En realidad la hija estaba en el hospital ?Z?, pero por ?casualidad? la madre se equivoco.
Al día siguiente, Lea se levanto temprano para ir a visitar a su amiga al hospital ?X? para cumplir con la mitzva de Bikur jolim- visita a los enfermos. Cuando llegó y preguntó por la pieza donde se encontraba, se sorprendió al escuchar que no estaba internada allí. No satisfecha comenzó a caminar por los pasillos para buscarla. Le pregunto a una enfermera que pasaba si la conocía, dándole como seña que hablaba castellano. La enfermera no reconoció el nombre, pero le sugirió que si ella también hablaba castellano, visitara a una señora latina que estaba por tener familia, no sabia hebreo y estaba muy nerviosa.
Si, esta señora era Miriam. Lea la tranquilizo, la ayudo con lo que necesitaba y aprovecho para pasarle la plegaria que se había ?olvidado? de entregarle a la mamá de Rajel.
Por otro de esas ?casualidades de la vida?, al día siguiente, Rajel se interna en la misma maternidad. Miriam que no la conocía, se sorprendió al escuchar que alguien hablaba castellano, se le acerco, le dio ánimo y le entregó en sus manos la plegaria, deseándole que tenga un buen parto.
El ciclo se cerró, ¿qué ?casualidad?, no?
Hay quien no puede ver, este es un ciego; ¡hay quien no quiere ver, este es un necio!