El líder de Israel debe ser de tierra por dentro y oro por fuera.
La Torá no es un libro de historia, sino un libro que enseña ética, moral y leyes. Por lo tanto, el orden de los acontecimientos y de los temas no es cronológico, sino lógico. Es por ello, que siempre tenemos que buscar la lógica en la relación entre los temas que se mencionan juntos, para deducir de ello el mensaje que la Torá nos quiere transmitir con dicha conjunción entre temas diferentes.
Rashi, en su comentario sobre el primer versículo de esta Parashá, pregunta cuál podría ser la relación entre el último tema de la Parashá anterior y el primer tema de esta Parashá.
Su explicación es que la Parashá anterior termina con las instrucciones acerca de la construcción del altar sobre el cual se ofrecían los Korbanot, y esta Parashá comienza con las leyes civiles que nos enseñan que la Gran Asamblea (los jueces del Sanhedrin) tenían que ubicarse siempre cerca del Mizbeaj (el altar).
Los comentaristas posteriores a Rashi, encuentran diversos mensajes ocultos en esta ley acerca de la cercanía física entre los jueces y el altar.
a) El pueblo de Israel tiene la misión de acercarse a D'os. En el tiempo del Bet Hamikdash y el Tabernáculo, la forma de lograr dicho acercamiento era a través de las ofrendas. Sin embargo, en épocas como la nuestra, donde ya no existen los Korbanot, los que se dedican a hacer justicia son los que nos acercan a D'os, puesto que no hay algo que D'os más quiera que la justicia, y no hay algo que más deteste que la injusticia.
b) El altar fue construido de tierra y recubierto de oro, y la ubicación de los jueces - cerca del altar - era para indicarles que el líder de Israel tenía que ser de tierra por dentro y de oro por fuera. La tierra significa la humildad puesto que no existe algo más humilde y simple que ella, y el oro significa la arrogancia, ya que es símbolo de prestigio y de valor.
El líder de Israel, en sus sentimientos internos y en su vida privada, debe ser muy humilde. No obstante, en la vida pública y comunitaria debe de ser firme y representar a la Torá con orgullo, sin pena, sin miedo de nada ni de nadie, ya que su orgullo no es personal, sino que es el orgullo de la Torá que representa.
"Y dijo el Eterno: he aquí un lugar junto a Mí, y allí te pondrás de pie sobre la peña; y sucederá que mientras va pasando Mi gloria, Yo te pondré en la hendidura de la peña, y te cubriré con mi mano hasta que Yo pase" (Exodo 33:21-22).
Esta orden que le da D'os a Moshé es un claro ejemplo de lo anteriormente mencionado. Si se trata de un asunto que tiene que ver con D'os, el lugar donde se tiene que parar Moshé - el líder - es sobre la peña, lo que significa firmeza, orgullo e importancia - sin tenerle miedo a nadie. Pero si la gloria Divina ya traspasó, es decir, el asunto pasó a ser particular, el lugar del líder es en la hendidura de la peña, lo que significa que en su vida particular el líder debe de ser humilde.