Haftará Parashat Pará
Yejezkhel
Ashkenazim: 36:16-38
Sefaradim: 36:16-36
"AL QUE ASPIRA A PURIFICARSE ESPIRITUALMENTE, LO AYUDAN DESDE ARRIBA"
El período previo a Rosh Jodesh Nisán es especialmente favorable para la purificación. Ese es uno de los motivos por los que se lee Parashat Pará en esta época del año.
Pero existe otro motivo todavía más básico: en la época del Beit ha Mikdash, el día 15 de Nisán, todo el Pueblo Judío traía el Korbán Pesaj.
La Parashat Pará trata de las leyes de purificación que se requerían para purificar al Pueblo Judío tras el contacto con un cadáver: requisito necesario para entrar al Beit ha Mikdash y traer el Korbán Pesaj.
La Haftará describe la época del Mashíaj, cuando Hashem ha de "salpicar aguas purificadoras en los Hijos de Israel" , quitándoles todas las impurezas que se incrustaron en sus almas.
"YO QUITARÉ EL CORAZÓN DE PIEDRA DE VUESTRA CARNE Y OS DARÉ EN CAMBIO UN CORAZÓN DE CARNE" (46:26)
Las mitzvot de Hashem son nuestra sangre vital. Al descuidarlas, el corazón se congela, y se separa de su fuente de vida. Nos quedamos rígidos espiritualmente hablando. El corazón se atrofia, se vulgariza, y finalmente se vuelve tan duro como la piedra.
Al final, va a ser demasiado tarde para un "bypass". Hashem vendrá y nos dará un corazón blando, que llore, que quiera oír la palabra de Hashem y que lata al compás de su Hacedor.
Dvar Hemelajá