Preguntaron en una universidad de ciencias, a un rector a un profesor, ¿pueden recibir a un muchacho que no sepa inglés o que no sepa matemáticas? Nos van a contestar que no! ¿Y si el muchacho se pone a llorar? ¡Que llore todo lo que quiera! Si no sabe inglés ni matemáticas no tiene nada que hacer acá!
En el mundo de la Tora las cosas se mueven de otra forma. Hay Alguien que maneja el mundo. En el mundo de la Tora, con lágrimas, se puede hacer mucho.
Está escrito en el Mishna Brura sobre el Arizal, que llegó a una categoría tan alta gracias a la alegría que tenía cuando estudiaba. Y preguntamos ¿qué tiene que ver la alegría? Si estudiamos matemáticas con alegría podemos entender más? En mátemáticas la alegría no tiene relación con el conocimiento, pero en la Tora sí!, ¿por qué?, porque nosotros no gobernamos el mundo, el mundo de Hakadosh Baruj Hu se comporta según Hakadosh Baruj Hu!!! Se puede comprar con lágrimas, o con la felicidad de cumplir con los preceptos, de muchas formas. Nosotros no podemos decidir quién será un Rosh Ieshiva y quién no. Tenemos que estudiar, adquirir toda la Irat Shamaim que esté a nuestro alcance y Hakadosh Baruj Hu hará el resto, El decidirá quién llegará hasta acá, quién más allá y quién menos...
Preguntó el rab hagaon Shlomo Levinstein Shlita, ¿por qué Moshe Rabenu era tartamudo? Tartamudo no es la descripción correcta, tenía problemas en los labios, en los dientes, en la lengua y había montones de letras que no podía decir: "de", "te", "ele", "ene", "ese", "ye", "erre", "pe", "eme", "ve" y "be". ¿Qué le queda? Casi nada... ¿Cómo Hakadosh Baruj Hu lo hizo así?
Pongámonos en el lugar de la madre de Moshe, seguramente pensaría como podría hacer para casarlo, ¿qué mujer podría aceptar casarse con él?, tendría que buscar una mujer sorda que no pueda escuchar a un hombre que hablara con tantos defectos... Cuando Moshe Rabenu le pregunta al Bore Olam su Nombre para transmitirlo al pueblo de Israel, ¿qué?, ¿acaso Moshe nació ayer? Hashem, Elokim, ¿faltan nombres? No, el problema era que Moshe no los podía decir, por eso Hashem le da otro nombre, con las letras que sí podía pronunciar...
El Ben Ish Jai nos cuenta que era sabido en todo Israel que la persona que diga "pakod pakadti etjem" sería el Mashiaj. El problema residía en que todos sabían esto, y a cada rato aparecía un loco o un borracho que decía ser el Mashiaj y lo probaba diciendo Vean, llegué, "pakod pakadti etjem"... ¿Cómo saber si era verdad o no? Pero con Moshe Rabenu sí lo sabemos, él no podía decirlo, cuando vemos que viene Moshe Rabenu y dice "pakod pakadti..." todos saben que el mismo Bore Olam es el que habla a través de la garganta de Moshe... y todos creen.
Hay algo todavía más profundo, así como la madre podía pensar sobre Moshe, intentemos hablar un rato de la forma que Moshe hablaba, sin poder pronunciar una frase completa, ¿qué interlocutor puede aguantar más de medio minuto sin entender nada de lo que intentamos decir? Aunque solamente intentemos hablar sin "pe", "eme" y "ve". Y con todo, con los sufrimientos de la madre que podría llorar pensando en el futuro de su hijo, ¿qué saldrá de él? Dice Hakadosh Baruj Hu, ¿ustedes quieren saber qué saldrá de él? El será "el profeta", nunca hubo ni habrá un profeta como Moshe Rabenu, Yo creo con fe completa que la profecía de Moshe Rabenu es verdad... el padre de todos los profetas. Aparte de esto "bajó la Tora del cielo" y enseñó la Tora a todo el pueblo de Israel y la Tora que él enseñó nunca se interrumpió hasta hoy. ¿Podemos entender? No podemos entender ni estamos obligados a entender, pero el mensaje es claro. Hagamos lo que tenemos que hacer, el resto dejémoslo en manos del Bore Olam...
Veamos qué pasó al respecto con Itro, el suegro de Moshe y el faraón...
Está escrito "y escuchó Itro... todo lo que Hashem hizo a Moshe y a Israel su pueblo, que Hashem sacó a Israel de egipto". Allí mismo pregunta Rashi: ¿qué fue lo que escuchó Itro que lo impulsó a ir hacia Moshe? Ah, no es pregunta, está escrito en el mismo versículo lo que escuchó Itro, ¿por qué Rashi viene a preguntar lo que ya está escrito explícitamente? ¿Y qué contesta Rashi? "Escuchó la partición del mar y la guerra con amalek". Digamos muchas gracias a Rashi, ya está todo escrito...
El Rosh Ieshiva rab Boruj Vaisbeker Shlita preguntó: ¿qué es lo contrario de una persona con Irat Shamaim? A lo que el rab Shlomo Levinstein le contestó: una persona alejada de la Tora. El rab le dijo que esa no era la respuesta, la respuesta estaba en la perasha (esa semana leían Vaera), en la plaga del granizo dice: "al que no preste atención", esto es lo contrario del que tiene Irat Shamaim, una persona que está alejada de la Tora, puede ser que estudie otra cosa y que preste atención a esa cosa, hasta que tenga una escuela donde le enseñen lo que quiere estudiar, pero quien no presta atención, no tiene escuela, es él que aquí en Israel dicen ahora, que "da vueltas...", o como decíamos nosotros, "él que vive en la Luna". Le preguntamos ¿cómo estás?, y la respuesta, por supuesto, no tiene ningún sentido, como si estuviera viviendo en la Luna. Se puede contestar así, todo nuestro accionar está supervisado por el Creador, y yo puedo darme el lujo de no prestar atención a lo que ocurre a nuestro alrededor. Ya mencionamos en una oportunidad lo que se puede aprender de la bicicleta... Todo tiempo que pedaleamos avanzamos, si dejamos de pedalear podemos caer. Si sentimos que nos cuesta trabajo es señal que estamos "subiendo", si vemos que resulta fácil, es porque estamos "bajando".
El rebe Mishtefanef entró al cuarto de unos alumnos y los vio jugando a las "damas". Cuando los alumnos vieron al rebe trataron de meterse en los agujeros de la pared, el rebe se les acercó y les preguntó: ¿qué se puede aprender de este juego? -¿Aprender de un juego, qué se puede aprender?, se preguntaron...
Primero, se puede ir sólo hacia adelante, nunca hacia atrás. Segundo, se puede avanzar de a un lugar por vez, no podemos saltear posiciones. Tercero, a veces podemos ganar piezas del contrario y avanzar dos lugares. Cuarto, todo es así hasta que alcanzamos la cima, cuando llegamos al punto más alto, podemos ir hacia cualquier lado y movernos con total libertad...
El rab Shalom Shvadron contó sobre el Jazon Ish que, lo alenu, una niña había perdido el conocimiento debido a un virus que le atacó la sangre. El padre la llevó al hospital Belinson en Petaj Tikva y la alojaron en "terapia intensiva" sin saber qué hacer. El padre fue a ver al Jazon Ish, le explicó todo y el Jazon Ish le dijo que para un caso así hacía falta que mucha gente haga un "rezo" por ella, que vaya a pedir que recen por ella en un "Colel", el padre fue, pidió, rezaron por la niña y volvió al Jazon Ish para informarle que habían rezado por su hija.
Ahora, dijo el Jazon Ish, andá al hospital, y sentate al lado de tu hija, "no hables con nadie", y cuando veas que comienza a llorar, llevala enseguida a tu casa...
Fue, se puso las ropas esterilizadas para entrar a la sala de terapia, y esperó. Entraron enfermeras para revisar el "suero", le preguntaron como estaba, y no contestaba, estaba mudo, el Jazon Ish le había dicho que no hablara con nadie. Entraron también doctores, le preguntaron algo, para distraerlo un poco, una palabra no salía de su boca. Todos pensaban que no hablaba debido al sufrimiento, a la impotencia de no saber qué hacer...
Pasaron unas dos horas, y de repente la niña empezó a llorar! Se sobresaltó el padre de tal forma, se levantó y corrió al Jazon Ish: Rebe, rebe, mi hija empezó a llorar... -Entoces, preguntó el Jazon Ish, ¿por qué no la sacaste del hospital?
-Uy! Me sobresalté tanto que no me di cuenta, me olvidé, voy ahora a buscarla.
-No ahora ya es de noche, dijo el Jazon Ish, andá mañana a buscarla...
Al otro día, después de los rezos de la mañana, el padre fue al hospital, y en el momento que entró, una enfermera lo reconoció y todos los ojos comenzaron a señalarlo: ¡Es él! Acá está!!!
En dos minutos todos los médicos y enfermeros de la sección estaban a su alrededor. El jefe de terapia se le acerca y le pregunta: ¿qué hiciste ayer? -Nada! -¿Por qué decís nada? Ayer estuviste acá, ¿qué hiciste? -Nada! -Entonces, ¿por qué no hablabas? -No tenía nada que decir... -Señor, basta de tonterías, ¿por qué tu hija lloró? -No lo sé... Preguntas y más preguntas, sin respuestas, pero la niña lloró, abrió los ojos, recuperó el conocimiento, le hicieron estudios y el virus había desaparecido!!! -¿Qué pasó aquí? -No sé, no sé y no sé... -Una sola cosa decime, ¿estuviste ayer con el Jazon Ish? -Sí. -Entonces podés llevarte a tu hija a casa...
Cuando llegás a la cima, podés ir en todas direcciones, con total libertad!!!
¿Cuál fue el milagro que nos ocurrió para tener un rabi Akiva que "prestó atención"? Si yo hubiera estado allí, continuó rabi Shlomo, hubiera visto una piedra a la que el agua le hizo un agujero, habría corrido a buscar una máquina de fotos, y después me pararía al lado de la piedra con una sonrisa y le diria al que encuentre: sacame una foto al lado de la piedra, pero que se vea el agujero...
Rabi Akiva prestó atención, al igual que Itro. Y Rashi tiene que decirnos lo que está escrito en el versículo porque todos escucharon lo mismo, pero Itro, prestó atención... ¿Por qué vino él solamente a Moshe?, ¿porque escuchó otra cosa? No, escuchó lo que todos escucharon y prestó atención
¿Por qué Hashem hizo las plagas de egipto? ¿Para sacar a los iehudim? No, para enseñarnos lo que es la fe. Entonces, ¿para qué partió después el mar? La respuesta, para que todo el mundo sepa que Hashem es el Rey de Reyes... El faraón, de acuerdo a lo que vemos, no tenía bien desarrollado el cerebro. Estaba en duelo por la muerte de su primogénito y, ¿sale detrás del pueblo de Israel? Mejor quedarse sentado y respetar la muerte de su hijo. ¿No le alcanzaron las diez plagas? En verdad, Hashem lo confundió, y pensó, "están perdidos, el desierto los encerró", y salió tras ellos. Todo esto para glorificar el Nombre de Hashem frente al faraón y todo su ejército y que todos sepan que "Yo Soy Hashem". Los iehudim estaban con el mar delante, los egipcios detrás, un miedo arrollador, ¿qué hacer?
Sabemos, había cuatro ideas, unos decían, saltemos al mar, nos ahogaremos, está bien, ya fue bastante... El segundo grupo, volvamos a egipto, pidamos perdón a los egipcios, les podemos decir que nos confundimos, en lugar de tres días tomamos seis, Moshe Rabenu nos confundió, pero reflexionamos... El tercer grupo pensó pelear contra los egipcios, seiscientos carros "elegidos", un millón ochocientos mil soldados, o dieciocho millones o ciento ochenta millones, más o menos, entremos en guerra... El cuarto grupo decidió: "vamos a GRITARLES", gritarles, sí, si cada familia tenía doscientos setenta niños, podemos imaginar la fuerza de los gritos (y cada padre y madre sabe lo que pasa cuando uno o dos de sus hijos empiezan a gritar). Moshe Rabenu le contestó a todos los grupos, siéntensen y vean la salvación que Hashem va a traernos hoy!!! Los egipcios que hoy vemos no los veremos nunca más... Hashem peleará por ustedes...
¿Qué pasaría ahora? Podían imaginar mil cosas pero nadie imaginaría que Hashem partiría el mar. El faraón quiso tomar agua y se mojó los "cachetes" pero no pudo tomar agua, el mar se partió también en el vaso. Llamó a su esposa y ella le explicó que no podía pasar el trapo en el piso porque el balde estaba lleno de agua pero el trapo, en el medio del balde estaba seco. Llamó al rey de amalek, le pidió que habra la canilla y éste le dijo que salían dos chorros de agua separados. El faraón entendió que era un "fenómeno mundial", que no dependía de Moshe Rabenu, y con esa tonta deducción entró al mar detrás de los Iehudim.
Todos vieron y escucharon lo mismo, Itro prestó atención y el faraón entró al mar, porque no prestó atención...