Rabino Richard Kaufmann
Reflexiones

Parashát Ki Tavó

"Y circuncidará Hashem tu D's tu corazón y el corazón de tu simiente, para que ames a Hashem tu D-s con todo tu corazón y con toda tu alma para que vivas". (Dvarim 30, 6).  Es decir, que en realidad el amor está allí presente, s&oa
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"Y circuncidará Hashem tu D's tu corazón y el corazón de tu simiente, para que ames a Hashem tu D-s con todo tu corazón y con toda tu alma para que vivas". (Dvarim 30, 6).

 Es decir, que en realidad el amor está allí presente, sólo que está tapado por una especie de prepucio espiritual, que al ser circuncidado, permite que el amor a Hashem aparezca y se manifieste en toda su grandeza y esplendor!

Y cuando ello sucede, nos llenamos de amor, de fuerza y energía, viviendo nuestras vidas con "MAYÚSCULA" y no con "minúscula", colmando de la luz de Hashem cada acto y aspecto de nuestro vivir!

Y debemos de entender, que amar a Hashem con todo nuestro corazón y con toda nuesta alma, es vivir nuestras vidas con el corazón y el alma desbordante de agradecimiento por todo lo que Hashem nos dá!

Y sin lugar a dudas, no hay cosa que despierte más el sentimiento de amor, que la toma de conciencia de todo aquello que quien nos ama hace por nosotros!

Y qué podemos decir nosotros en relación a Hashem, quien nos dá la vida, permite cada instante de nuestra existencia y nos permite gozar de felicidad, abundancia, alegría y bendición!


"Bendito éres en la ciudad y bendito éres en el campo". (Dvarim 28, 3).

Es decir, que cuando la persona hace lo correcto y transita por los caminos de Hashem, la bendición de Hashem lo acompañará en toda situación y circunstancia en la cual se encuentre, ya sea en la ciudad o en el campo, al entrar en una situación o al salir de ella!

Y cuánto más la persona se esfuerza por ser una fuente de luz e inspiración para su entorno y para sus semejantes, mejor fluye la bendición de Hashem a través suyo, beneficiándose la personas y con ella todos los demás!

Y debemos de pedirle y rogarle a Hashem que podamos con nuestro accionar santificar su grande y sagrado nombre, para que las personas bendigan a Hashem al ver que nosotros, sus hijos, hacemos lo bueno y correcto para bendición y beneficio del mundo y de todos quienes lo habitan!


"Ordenará Hashem la bendición en tus graneros y en toda la obra de tu mano, y te bendecirá en la tierra que Hashem tu D-s te dió". (Dvarim 28, 8).
 

Es decir, que si "nos portamos bien" y hacemos la voluntad de Hashem, lo cual es siempre para nuestro beneficio y bendición, entonces en forma natural la bendición de Hashem se posará sobre nuestros bienes materiales y sobre todo aquello que nuestras manos hagan!

Empero, además de esta bendición sober nuestro accionar, el versículo finaliza con la expresión "y te bendecirá en la tierra que Hashem tu D-s te dió".

Es decir, la bendición principal es que sea en la tierra de Israel, pues en todos los demás países, si bien podemos tener bendición material y nos puede ir bien, no es el lugar que Hashem eligió para el pueblo de Israel, siendo una situación meramente temporal, aún si ha durado hasta el día de hoy casi dos mil años!

Y hoy en día tenemos el mérito de ver la bendición inmensa que Hashem hace fluir sobre nuestra amada tierra de Israel, viendo como todo crece en ella y todo se potencia en ella, fruto de la visión y bendición permanente de Hashem sobre ella!

 

"Y verán todos los pueblos del mundo que el Nombre de Hashem está puesto sobre tí, y te temerán". (Dvarim 28, 10).
 

Es decir, que si cumplimos con las leyes de Hashem y hacemos Su voluntad tal como él nos lo ordenó, no tenderemos que pelear y lidiar con las demás naciones del mundo, pues ellas verán evidentemente cómo Hashem está con nosotros, no osando atacarnos, temiéndonos y respetándonos!

Y la verdad es, que frente a sabios realmente grandes de nuestro pueblo, también personalidades y reyes gentiles sentían un respeto y un temor reverencial, pues les era claro y evidente que ellas eran personas santas, que la luz y el Nombre de Hashem está sobre ellos!

Y cada uno que cuida y respeta las leyes de Hashem, genera una especie de halo de luz protector sobre sí mismo, alejando el mal y atrayendo el bien!

Y si bien uno puede o no creer en ésto, hay relatos de todas las épocas, que evidencian como incluso animales salvajes se comportaban como si fueran pequeños "gatitos", cuando una persona sagrada estaba junto a ellos; como ser Daniel en la guarida de los leones y otros sabios incluso relativamente contemporáneos a nosotros ...

 


 

"Y sérá cuando vengas a la tierra que Hashem tu D-s te dá por heredad, la heredarás y te asentarás en ella" (Dvarim 26, 1).
 

Es decir, Hashem nos dió la tierra de Israel por heredad "de jure", pero depende de nosotros que realmente la heredemos en forma práctica "de facto", transformando a lo que Hashem nos dió en algo material, real y concreto!

Y la verdad es, que la luz de Hashem fluye todo el tiempo sobre nosotros, dependiendo que coloquemos nosotros a los recipientes correctos, haciendo a su vez las acciones correctas, ameritando así poder recibirla!

Y la tierra de Israel debe de ser conquistada y heredada, asentándonos concretamente en ella!

Es decir, la forma de obtener dominio físico y espiritual sobre la tierra de Israel no pasa simplemente por realizar una conquista militar tal como Hashem nos lo ordenó, sino principalmente, por el asentamiento real del pueblo de Israel en ella, el cual viene a posteriori de la conquista y es el que provoca que realmente concreticemos nuestro derecho sobre ella!

Y hoy en día, que casí la mitad del pueblo judío vive en la tierra de Israel, estamos cumpliendo fielmente con la orden divina ordenada por Hashem hace más de 3300 años, aumentando con ello nuestros méritos, hasta que todo el pueblo de Israel habite finalmente en ella!

Y no existe parangón en los anales de la historia de la humanidad, de un pueblo que haya logrado retornar a su patria luego de 2000 años de desearla y añorarla, reconstruyendo a su vida nacional a la luz de su historia y sus valores y tradiciones originales!

Y también hoy en día, la tierra de Israel llama a sus hijos que aún están dispersos por el mundo, invitándolos a animarse a dar el paso y retornar finalmente a Casa!
 


"Y te alegrarás por todo el bien que te dió Hashem tu D's y a tu hogar, tu y el Leví y el extranjero que habita contigo" (Dvarim 26, 11).
 

Varias son las cosas que nos dice este pasuk!

En primer lugar, que tenemos la mitzvá de alegrarnos delante de Hashem por todo el bien que nos dá, de lo cual se deduce que quien vive con alegría demuestra con ello su agradecimiento a Hashem!

En segundo lugar, que hay que tomar conciencia de la amplitud del bien que Hashem nos dá, pues no sólo nos beneficiamos nosotros en forma personal, sino que a través nuestro, todo nuestro entorno cercano también se beneficia!

En tercer lugar, que la forma judía de alegrarnos delante de Hashem, es incluyendo no sólo a nuestro círculo más cercano, sino incluyendo a las personas más débiles o solas de la sociedad, que también puedan alegrarse junto a nosotros, beneficiándose de la bendición que Hashem nos dá!

Por útlimo, cuando así lo hacemos, por medio de ello expandimos a nuestro recipiente espiritual, ameritando recibir una mayor y más profunda bendición!
 


"Bendito serás en la ciudad y bendito serás en el campo" (Dvarim 28, 3).
 

Es decir, si actuamos en armonía con las leyes de Hashem y vivimos alineados con las mitzvót, no importa dónde físicamente estemos y no importa el tipo de actividad que hagamos, pues la bendición de Hashem se habrá de posar sobre nosotros y tendremos éxito en todo y con todos!

En cambio, si no estamos alineados con Hashem y no vivimos en armonía con las leyes y valores de la Torá, puede ser que obviamente logremos ciertas cosas en la vida y concretar ciertos objetivos, pero a largo plazoes imposible que a partir de ello podamos tener bendición!

Y así como una persona que actúa en contra de leyes físicas, tarde o temprano terminará perjudicándose, así una persona que actúa en contra de leyes espirituales, con más razón aún que sus consecuencias no las podrá esquivar!

Es por ello, que si bien tenemos libre albedrío de hacer lo que querramos, la pregunta que deberíamos de hacernos es qué es realmente lo que nos sirve y más nos conviene; amén del ideal de hacer aquello que es correcto con pureza de intención, simplemente por amor a Hashem, independientemente de nuestra supuesta -o no- conveniencia!
 


"Bendito serás al venir y bendito serás al salir" (Dvarim 28, 6).


A veces una persona es recibida con muchas bendiciones al llegar a un lugar pero no es despedida del mismo modo al dejar el lugar; ya sea porque no satisfizo las expectativas o porque hizo cosas indebidas que alejaron de sí la bendición.

Otras veces pasa que la persona es mal recibida al llegar a un lugar, y tiene que pelear y luchar mucho para ganarse su lugar, siendo bendecida al dejar el lugar, por todo el bien que finalmente sí logró traer!

La Torá bendice a la persona para que sea tan bendecida al llegar como al irse!

Es decir, que goce con la bendición de Hashem en todo lo que haga, para que sea recibida con amor y bondad y sea despedida con amor y bondad!

Y la verdad como siempre enfatizamos, es que según la manera como la persona se comporta hacia los demás, así se habrán de comportar los demás y también desde el Cielo hacia uno!

Y conviene siempre hacer lo máximo por dar crédito a la gente, ayudar, apoyar y bendecir lo que los demás hacen, pues al hacerlo traemos bendición sobre dichas personas, expandiendo el bien hacia nosotros y hacia todos los demás!

 

Shabat Shalom - Rav Richard Kaufman

rkaufmann2016@gmail.com



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