Judaismohoy es un sitio de educación judía, nunca hemos tenido la intensión de polemizar o discutir con nuestros lectores, pero creemos que es necesario en este artículo aclarar algunos puntos al respecto. En primer lugar, judío es quien nace de madre judía,

Judaismohoy es un sitio de educación judía, nunca hemos tenido la intensión de polemizar o discutir con nuestros lectores, pero creemos que es necesario en este artículo aclarar algunos puntos al respecto. En primer lugar, judío es quien nace de madre judía, o quien pasó por una conversión válida.

Para ello la conversión debe ser realizada por un consejo rabínico reconocido como tal por el rabinato ortodoxo de Israel. Una vez realizada la guerut, la persona es aceptada por la comunidad como un verdadero judío con todos sus derechos y por supuesto obligaciones.

No solo que es aceptado por todos los judíos como tal, sino que en el Shuljan Aruj – el codigo legal judío - hay muchas mitzvot sobre la conversión, los conversos y como debe ser el trato de los judíos con los conversos.

La Torá nos ordena que amemos al guer tzedek (converso justo) y en muchas citas nos prohíbe herir sus sentimientos, como dice por ejemplo en Devarim 10:18 "Di-s ama al guer dándole vestimenta y pan".

El judío esta obligado también a no oprimir a un converso en forma verbal, por ejemplo ocupando apodos para referirse a el, o mencionarlo con palabras despectivas, así también la Torá nos ordena a no oprimir al converso en asuntos monetarios, etc.

A lo largo de miles de años, el pueblo judío ha aceptado las conversiones. La religión judía no es del todo una religión que busca prosélitos, tampoco es misionera no buscamos gente para convencerlas y convertirlas. Sin embargo muchos gentiles han abrazado la fe judía y son aceptados en las comunidades como parte integral de ellas. Hoy en día vemos como mucha gente en todo el mundo se interesa por la Torá y unos cuantos de ellos buscan ser parte de este pueblo y retornar a la cultura milenaria del pueblo de Israel.

La importancia de los Guerim en Am Israel

Grandes personajes de nuestro pueblo fueron guerim, o hijos de guerim, citando a algunos:

Batia, la hija de Paro quien según nos relata la Torá y los Midrashim se convirtió y cuido a Moshe de la muerte segura por el decreto de su padre el rey de Egipto. De los 10 nombres que recibió Moshe, solo se le conoce por este, por cuanto fue el nombre que ella le dio.

Yitró, el suegro de Moshe Rabenu que en Egipto, donde fue consejero de Paró, y luego en Midian, profesó el culto a todas las idolatrías como esta escrito en Shemot 18-11:

“Ahora se que es Grande HaShem de todo los dioses.

Explica el comentarista Rashí: "Lo conocí antes, y ahora más" (y que significa) de todos los dioses "enseña que él habría conocido todas idolatría en el mundo que no se privó de adorar a ningún ídolo.

Yitró al escuchar sobre el cruce de Am Israel por el mar que se abrió para que pasaran, y la guerra que tuvo con el pueblo de amalek, se convenció de que el monoteísmo, la creencia que provenía de nuestro patriarca Avraham era la verdadera forma de creer y servir a Di-s, la religión verdadera.

Yitró se convirtió con toda su convicción, tanto es así, que la sección de la Torá que enseña los 10 mandamientos, lleva el nombre de Parashat Yitró.

Rut la moabita, mencionada en la Meguila de Rut escrita por el Profeta Shmuel, quien fue la bis abuela del Rey David, y de quien vendrá en línea directa el Melej HaMashiaj

Esta semana leeremos en la Torá la parashá de Yitro y no es casualidad que justo en esta semana estamos tocando este tema.

Sabemos que en cada semana vuelve la fuerza y la energía de la sección semanal de la Torá.

La Torá dice: "Y escuchó Yitró", preguntan nuestros sabios, ¿qué es lo que escuchó, que lo llevó a cambiar toda su vida y renunciar completamente a la idolatría? Nos explican los comentaristas. Yitró “vió” el cruce de los judíos por el Yam Suf, y como se hundieron y ahogaron en él todos los malvados egipcios. Yitró vio como Di-s recompensa a los justos y castiga a los malvados, Vió que Di-s mira desde el cielo y se agacha hacia la tierra para estar con nosotros.

Para las otras religiones, el concepto de Di-s es el de un “ente” que está en los cielos y sólo mira desde lo alto, como si no fuera participe de lo que sucede en la tierra en cada instante. Sin embargo, para el pueblo judío, HaShem es un Di-s que interactúa constantemente en todo y por supuesto en nuestras vidas, supervisando y guiándonos.

Esta escrito en Pirke Avot 2-1 “Mira en tres cosas, y no pecaras, que sepas lo que está por arriba de ti, un ojo te mira y una oreja te escucha, y todas tus obras son escritas en un libro”

Para Am Israel también existe otra forma de supervisión Divina, se llama Hashgajá pratit, vale decir una supervisarían individual y particular para cada judío, así es que en Yom Kipur, cada juno pasa delante de El para ser juzgado como pasan las ovejas una a una delante del pastor para ser contadas.

Otro de los gigantes que guiaron y enseñaron a Am Israel fue Rabi Akiva, el también provenía de una familia de conversos -ben guerim- y llegó a ser uno de los mayores exponentes de la Tora Oral, su historia de abnegación y sacrifico por la Torá lo hizo crecer y convertirse en uno de los pilares del pueblo. Aprendemos de él, que comenzó sus estudios de Torá a la tardía edad de 40 años, cómo por medio del esfuerzo y la abnegación podemos llegar a ser sabios y talmidey jajamim, Rabi Akiva es un ejemplo para todas las generaciones, llegó a tener mas de 24.000 alumnos.

Onkelos: fue sobrino de uno de los emperadores romanos (o de Titus o de Adrianus) se convirtió con mucho esfuerzo bajo la amenaza de muerte por parte de los romanos. Onkelos o Aquila, compuso el Targum, una traducción de toda la Torá explicada en arameo que leemos todas las semanas acompañando al texto original en hebreo.

En el tiempo de las persecuciones en Europa encontramos otro personaje abnegado y justo.

Avraham Katzuji, durante la segunda guerra mundial, un funcionario de la embajada japonesa ayudo a la comunidad de los alumnos de la Yeshiva de Mir para escaparse de Lituania ante la inminente llegada de las tropas nazis. Cientos de alumnos de la Yeshiva y los grandes Rabinos de la época tenían que escaparse rápidamente, pero como hacerlo y para donde ir, esta es una historia de salvación y Divina providencia fascinante. Un funcionario japonés de la embajada japonesa en Lita (Lituania) los ayudó emitiendo visas a cientos de ellos que en su escape tenían que pasar por la ciudad de Kobe para llegar a Shangai. Años después el señor Katzuji se convirtió al judaísmo, vivió y falleció en Jerusalem donde fue enterrado en el Monte de los Olivos con todos los honores que reciben los grandes rabinos de Israel por su heroica misión de salvar a tantos judíos en desgracia.

Vemos como el judaísmo no rechaza a los conversos, al contrario se les quiere, se les ayuda y se los hace participes de la comunidad, toda vez que realizan la conversión como Di-s manda.

Un converso puede llegar a tener un papel muy especial dentro del pueblo. ¡NO ES JUDIO EL QUE SE SIENTE JUDIO, es judío el que es judío!

No nos dejemos engañar. Hay muchos desvergonzados que intentan confundir a la gente convenciéndolas que se puede ser judío de un día para otro, sin el cumplimiento cabal de todos los preceptos de la Torá. Es como pensar que porque yo quiero ser médico con todo mi corazón, se me da derecho de operar a la gente, sin antes haber pasado por los 6 años de estudio en la universidad, y rendir los exámenes necesarios.

Si tanto se requiere para sacar un título que solo nos servirá en este mundo para ganarnos un par de pesitos, cuanto mas y mas serio debe ser el sacar un “título” de judío que nos compromete con Di-s no solo en este mundo, sino aún más en el mundo eterno.

Como lo mencionamos anteriormente, solo es válida una conversión ortodoxa competente, y les advierto que esto no es sectarismo, es decir la verdad, para que no sean engañados. El judaísmo es milenario, recibimos la Tora hace mas de 3000 años y desde entonces a sido transmitida de boca de maestro a alumno, así como nos enseña la primer Mishná de Pirke Avot.

El reformismo, como su nombre lo indica, trata de reformar la Tora. La Torá es EMET - verdad, y ¡la verdad no puede ser reformada!

También el así llamado judaísmo conservador, es parte de la reforma, trata de incorporar conceptos ajenos a nuestra religión dejando de lado el Shuljan Aruj, buscando los ajustes a sus conveniencias. Todo aquel que les diga que algún precepto se puede pasar por alto por ser antiguo, es un farsante, aléjense de él lo mas posible.

La Tora no se puede cambiar, no es negociable, es la palabra viva de Di´s. Decir que alguna parte de la Torá no debe cumplirse hoy en día, o que se debe cumplir según los cambios que se produjeron en la sociedad actual, es destruir la Torá.

Otro fenómeno cristiano son los que se hacen llamar “judíos mesiánicos”, que no son ni judíos ni mesiánicos. Ni el nuevo testamento ni sus personajes son parte del judaísmo. Disculpen por ser tan franco, pero hay veces que tenemos que aclarar bien las cosas para que las personas que buscan verdaderamente acercarse a Di-s no sean engañadas.

En  los 13 principios de fe el RAMBAM –Maimónides- escribre lo siguiente: En el octavo principio esta escrito: “Creo con perfecta fe que toda la Torá que está en nuestro poder es la misma que fue dada a Moisés, nuestro maestro, la paz sea con él”. El noveno dice: “Creo con perfecta fe que esta Torá no será cambiada, y que nunca va a haber otra Torá del Creador, Bendito sea Su Nombre”.

Queremos aclarar que toda persona no judía que desea acercarse a Di-s lo puede hacer, sin necesidad de convertirse al judaísmo, puede ser un excelente Ben Noaj  y cumplir así con la voluntad de nuestro creador cumpliendo con los 7 mandamientos que Di-s le entrego a Noé.

Para mas detalles pueden visitar http://www.bneinoaj.org/

Ahora bien, si en verdad desea convertirse, debe saber que eso lo obliga, como a cualquier otro judío, a cumplir con los 613 preceptos que Di-s nos ordenó. ¡No hay  descuentos para nadie!, debe saber que tendrá que rendir cuentas en el mundo venidero por cualquier transgresión de los preceptos, así como lo explica el Rambam:  “Creo con perfecta fe que el Creador, Bendito sea Su Nombre, recompensa a los que guardan sus mandamientos y castiga a los que las transgreden”. Como lo vimos anteriormente, el judaísmo no es proselitista, no creemos que todo el mundo deberían convertirse; pero si quiere que todos conozcan la palabra de Di-s como dice en la Torá que el Pueblo Judío es una luz para las naciones.

La Torá nos obliga a borrar la idolatría del mundo, para que todos reconozcan que hay un Di-s UNICO que gobierna todo el mundo y a todas Sus criaturas.

No hace falta que seas un judío si no naciste de vientre judío, pero como lo hemos explicado anteriormente, debes cumplir por lo menos con los 7 preceptos entregados por Di-s a Noaj para toda la humanidad.

Qué trágico es, cuando un individuo motivado por una hambrienta búsqueda de la verdad, se introduce en falsas creencias, que tratan de facilitarles en camino, y en verdad, solo lo llevan por un camino equivocado”.

Convertirse al judaísmo y ser un guer, no es nada fácil, pero no puede ni debe ser de otra forma, considerando el inmenso salto espiritual que esto envuelve.